El Alto Comisionado de ONU para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres, alertó hoy del riesgo de que el conflicto sirio se propague hacia países vecinos y urgió a la comunidad internacional a apoyar en especial a Líbano.
Líbano es el país que acoge a cerca de 500 mil sirios de 1.6 millones de refugiados que han sido registrados por ACNUR en los países que comparten fronteras con Siria.
Guterres, inició una visita por la región y recordó que hace falta un respaldo masivo tanto para los refugiados como para las comunidades y países que los han recibido, subrayó ACNUR en un comunicado.
Durante su estancia en Beirut el Alto Comisionado y el primer ministro libanés, Najib Mikati presentaron un plan humanitario que solicita a la comunidad de donantes internacionales mil 700 millones de dólares para atender las necesidades de los refugiados sirios en el país árabe.
Según las proyecciones del ACNUR, el número de refugiados sirios en Líbano podría sobrepasar el millón para finales de este año, con la consecuente presión que ésto significa para las comunidades que los albergan.
Guterres indicó que Líbano no puede afrontar por sí solo la crisis de refugiados sirios y destacó la importancia de que ese país se mantenga estable por el bien de la región.
“La comunidad internacional debe superar sus divisiones y unirse para poner fin a los enfrentamientos, sólo así podremos evitar que las llamas de la guerra se extiendan a todo Medio Oriente”, apuntó el Alto Comisionado.