El alcalde de Acuña, Coahuila, Alberto Aguirre Villarreal defendió la campaña de “respeto a la moral, el pudor, la decencia y las buenas costumbres” que anunció hace unos días la Dirección Municipal de Seguridad Pública.
Aguirre rechazó que esta medida establezca la prohibición de usar minifaldas o vaya contra el travestismo, sin embargo argumentó que se trata de un llamado a que las mujeres no vistan "provocativamente" en la vía pública, es decir de manera que "atente al decoro, a las buenas costumbres, a la integridad moral".
Lo que se sanciona, dijo es exhibirse de manera indecente o indecorosa en cualquier sitio público.
En entrevista radiofónica, el presidente municipal refirió que la información surgió a raíz de que se realizaron operativos en bares y cantinas donde detectaron a gente que "sale vestida o de tal manera, acompañando personas que los hacen creer que son mujeres y se visten de otra manera".
El edil afirmó que el llamado responde a una petición que recibió por parte de la gente del Centro Histórico y de la Cámara de Comercio que solicitaron al ayuntamiento "poner orden".
"En estos lugares durante la tarde y la noche se salen de los antros salen las mujeres con los 'parroquianos', a veces con actitudes que atentan contra la moral... besándose, abrazándose, en fin; acciones que no van de acuerdo a la moral", sostuvo.
"Se trata de evitar cualquier situación que afecte contra la moral", concluyó Aguirre Villarreal.