El campeón mundial pesado del CMB, el ucraniano Vitali Klitschko, declaró ayer que contenderá para ser el próximo presidente de su país. (EFE)
Tan alto como su legado. El boxeador ucraniano Vitali Klitschko apenas si puede entrar a la pequeña sala de conferencias del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Sus más de dos metros de altura hacen ver los espacios más pequeños de lo que aparentan.
Ayer, el campeón mundial de peso completo del CMB estuvo de visita en la Ciudad de México para reunirse con el presidente del organismo, José Sulaimán, y platicar sobre el aplazamiento de su defensa mandatoria. Pero también aprovechó para expresar su orgullo de retener el fajín de la que fuera la división más importante dentro del boxeo por décadas.
"Estoy muy contento de estar aquí en México. Déjenme expresarles que estoy feliz de tener este cinturón verde con oro, el cual me enorgullece que sea el mismo cinturón que muchos años atrás le perteneciera a Lennox Lewis, Mike Tyson y al más grande de todos, Muhammad Alí. Me satisface ser el campeón del mundo en la división de los completos, el título más importante", resaltó Klitschko.
El boxeador ucraniano conversó con Sulaimán para explicarle que por una lesión en su mano derecha no podrá pelear el resto del año.
"Klitschko vino a México para conversar conmigo, porque tiene una defensa mandatoria, pero tiene un problema con el puño derecho. Lo van a tratar y no puede estar listo hasta que su médico así lo dictamine", detalló el presidente del CMB.
Vitali tendría que hacer su defensa mandatoria ante el canadiense Bermane Stiverne, campeón plata del organismo. Pero ante esta lesión que padece el ucraniano, se le permitirá aplazar este combate hasta principios de 2014.
"Hace 10 años gané este campeonato y me siento orgulloso de serlo de un organismo con miles de boxeadores que pelean bajo esta asociación. Un organismo que está abierto a muchos peleadores", destacó.
Klitschko alcanzó por primera vez su campeonato en 2004. Desde entonces suma 12 defensas exitosas. Por esta situación es que el CMB le permitirá aplazar su combate mandatorio hasta el otro año.
En ese tiempo, el pugilista de peso completo aprovechará para cristalizar su intento de ser candidato a la presidencia de su país, para lo cual presume muchos adeptos. "Quiero que mi país avance en su economía y bienestar como yo lo he hecho en el boxeo", compartió el monarca.