El diputado Ricardo Monreal presentará un punto de acuerdo en la Cámara de Diputados para que se investigue y enjuicie a los responsables del gobierno del ex presidente Felipe Calderón que participaron en lo que llamó el "fraude a la nación", estimado en más de 450 millones de pesos al adquirir más de un millar de falsos detectores de origen inglés, como el GT200 y el ADE651, para localizar enervantes, explosivos y armas.
"Ahí hay un negocio millonario de tráfico de influencias, de peculado, sobornos, y creo que va desde los secretarios de estado al propio (ex) presidente de la República", dijo el coordinador del Movimiento Ciudadano en el Palacio Legislativo.
De igual manera, expresó que pedirá se revisen "todos los casos penales de personas que fueron detenidas con este sistema de detector", conocido en el ejército como la "ouija del diablo", utilizado en retenes y operativos en la lucha contra el narcotráfico.
Considera que el peritaje científico de campo realizado en 2011 por físicos mexicanos que probaron la ineficacia de los equipos, es razón suficiente para que "la Procuraduría se desista de la acción penal contra esas personas" y se les libere, pues "debe de haber mucha gente inocente en la cárcel".
Monreal, a su vez, retomará los planteamientos del punto de acuerdo que, motivado por dichos artefactos, presentó como senador en diciembre de 2011, y que "se aprobó pero nunca se le dio respuesta porque era un asunto muy delicado".
En tal documento solicitó a la Procuraduría General de la República (PGR) rinda un informe del número de personas "con averiguación o investigación derivada del señalamiento del detector molecular GT200".
Exhortó a los titulares de las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena), de Marina (Semar), y de Seguridad Pública (SPP) a informar de detenciones u operativos en los que se usó el equipo.
Finalmente, solicitó al Ejecutivo federal detuviera el uso de esos artefactos en territorio nacional.
En su nuevo punto de acuerdo, además propondrá que el gobierno mexicano envíe una nota diplomática al gobierno de Reino Unido al trascender que el ex embajador Giles Paxman estuvo involucrado en la promoción y venta del GT200, manufacturado por la empresa inglesa Global Technical LTD.
El dueño de la empresa es Gary Bolton, que en este momento es enjuiciado en una corte de Londres bajo el cargo de fraude.
En opinión del legislador, dicha nota diplomática contra el ex embajador, que estuvo en el país de 2005 a 2010, debe cuestionar "el uso de canales institucionales para poder generar delitos y para haber provocado este quebranto económico al país, este engaño del que ha sido objeto México".