Pide paz en mensaje de Año Nuevo
En su mensaje de Año Nuevo, el obispo de Torreón, José Guadalupe Galván Galindo, hizo un llamado a las personas a convertirse en constructores de la paz.
Monseñor deseó a los laguneros un feliz año lleno de bendiciones en Jesucristo. "Cada año se despierta en nosotros el deseo de ser mejores. Un deseo muy humano y profundo, que nos mueve a muchos de nosotros a tener nuevas y diferentes actitudes ante la vida".
ESFUERZO
"Éste sería un buen deseo de Año Nuevo, por ello invito a que cada día nos esforcemos a ser constructores de la paz en nuestras familias, en nuestros ambientes sociales, laborales y culturales".
El obispo recordó el mensaje del Papa Benedicto XVI que dice que la paz es un don de Dios y obra del hombre, que se va construyendo cada día en la verdad, la libertad y la justicia.
Consideró que sí es posible construir una sociedad basada en la paz. "La paz no es un sueño, no es una Utopía, la paz es posible".
Y agregó: "El que trabaja por la paz, según la bienaventuranza de Jesús, es aquel que busca el bien del otro, el bien total del alma y el cuerpo, hoy y mañana".
TRANSFORMACIÓN
Llamó a transformar la realidad, a veces tan marcada por la injusticia y la violencia, respetando la dignidad de la persona humana, promoviendo nuevos esquemas económicos y sociales, basados en la justicia y en la promoción humana.
"Invito a todas las familias laguneras a educar a sus hijos en un ambiente de paz: cultivando los valores cristianos y morales, guiándolos por el camino del bien", dijo Monseñor.
