Cinco ex rectores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) exhortaron al gobierno de la república a que "con sensibilidad, contribuyan a que se reestablezca la normalidad en la institución", al tiempo que exigieron se eviten "severos daños morales, físicos y económicos".
En su pronunciamiento, dirigido al gobierno federal, a la comunidad universitaria, y a la sociedad mexicana, los ex rectores "externan con firmeza su repudio a la violencia", además de señalar que la toma de la rectoría "se trata de una inaceptable agresión que se ejerce, de nueva cuenta, contra la Universidad".
El documento, de cinco párrafos, signado por Guillermo Soberón, Octavio Rivero, José Sarukhan, Francisco Barnés, y Juan Ramón de la Fuente, señala la solidaridad de los ex funcionarios con el rector José Narro Robles mediante el respaldo a su postura firme de rechazo a los acontecimientos, así como a la denuncia de hechos que se hizo ante la autoridad jurídica correspondiente.
"El trabajo universitario tiene como propósito el bien de México y es, asimismo, uno de los más valiosos elementos para un futuro promisorio", expresa el documento dado a conocer este mediodía.
