Espera. El alcalde Guillermo del Real esperó 20 minutos para votar ante una confusión por el ingreso de cámaras en la casilla.
En Matamoros hubo poca participación ciudadana en las urnas. El proceso se vio "desangelado", no hubo quejas ciudadanas por apertura de casillas tardía y casi en ninguna se veían filas de personas esperando votar. No obstante, hubo señalamientos de amenazas de personas armadas.
Para las 2:30 de la tarde apenas había votado el 50% del padrón electoral de la casilla 270 que cuenta con 439 electores.
En la casilla 275, que tiene 694 electores apenas se llevaba el 50% de participación a las 4:30 de la tarde.
El señor Rubén Gómez, de la colonia Obrera, acudió a las urnas acompañado de su hijo Carlos y su esposa Paulina Guerra, quien se traslada en silla de ruedas, al considerar su derecho a votar como un deber ciudadano. Los tres votaron.
"Es un deber votar, nosotros siempre pedimos que hagan las cosas mejor, es importante tener decisión, saber elegir, si luego los candidatos no hacen las cosas bien uno puede quejarse, pero si no vota, ¿cómo?", dijo Rubén.
Para la señora María Leticia Rojas Escareño es necesario acudir a votar para decidir el rumbo de la ciudad. "Queremos un cambio, vemos cómo se encuentra la ciudad y no nos gusta, yo en lo particular estoy harta del PRI, vivo en la calzada Lázaro Cárdenas y siempre tenemos brotes de aguas negras", dijo.
No obstante, también hubo señalamientos que enrarecieron el proceso. Por ejemplo, en la casilla 274, cerca de la calle Rocha en la zona urbana de Matamoros, hubo señalamientos de que hombres armados quitaron un teléfono celular a una joven porque estaba grabando la compra de votos.
En Congregación Hidalgo hubo señalamientos de algunos priistas que se habían robado urnas, no obstante, hasta el cierre de esta edición no pudo ser confirmada esta versión.