Problema. La venta de comida 'chatarra' aún se sigue realizando en diversas escuelas, a través de las tienditas que hay en el interior de los planteles educativos.
El nuevo reglamento para el expendio de alimentos en los planteles educativos ya contempla sanciones para aquellas personas que tienen a su cargo las denominadas tienditas escolares, por lo que incluso se podría llegar a la cancelación de la concesión o permiso en caso de que incumplan con la venta de alimentos saludables, en lugar de la comida "chatarra" que aún se distribuye en algunas cooperativas.
En este sentido lo dio a conocer el presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia (AEPF), Miguel Ángel Villanueva Ruano, tras hacer énfasis en las cooperativas o tienditas escolares que estén incumpliendo con la obligación de vender productos saludables, "los cuales son muchos. Yo creo que hemos confundido que son una dieta. La verdad es que no es una dieta: es un alimento sano bien elaborado en el hogar que se comparte".
Asimismo, agregó que la primera responsabilidad para que los estudiantes consuman alimentos saludables y nutritivos es de los padres de familia, mientras que la segunda obligación de no vender productos "chatarra" la tienen los concesionarios establecidos en las escuelas y los cuales son contratados por el director y las mesas directivas de los planteles educativos.
Habría que vigilar mucho, detalló, con el apoyo de la Secretaría de Salud del Estado, en aquellas escuelas donde ya se va a implementar el nuevo reglamento, en virtud de que éste contempla sanciones para las cooperativas escolares que estén incurriendo en el incumplimiento del citado ordenamiento en el aspecto de la distribución de productos nutritivos de alta calidad, bajos en grasas y azúcares, para que dejen de venderse esos dulces y alimentos que afectan la salud de los estudiantes de Educación Básica, es decir, preescolar, primaria y secundaria.
Lo anterior ha redundado en problemas de salud como la obesidad y otras enfermedades que prevalecen actualmente; pero también tienen que participar los inspectores municipales en el exterior de las escuelas, para que se retire a los vendedores de las puertas de los planteles educativos (a 30 o 40 metros de distancia), por lo que la compra de productos "chatarra" será exclusivamente de los padres de familia.
