El pasado fin de semana comencé y terminé de leer "Cartas a un Joven Poeta" de Rainer Maria Rilke (1875-1926) es considerado uno de los poetas más importantes en lengua alemana y de la literatura universal, siendo un autor con gran influencia durante la primera mitad del Siglo XX en toda la poesía europea.
Regresando al libro y a la frase con el cual inicio la columna, el trabajo de Rainer en esta publicación (editada por primera vez en 1929) se compone de 10 cartas que escribió a un joven poeta desconocido de nombre Franz Xaver Kappus.
Es un intercambio de correspondencia, de ideas y opiniones sobre la creación artística de Kappus, Rainer le expone con claridad y elegancia sus opiniones sobre lo que ha escrito el joven poeta, pero eso no es todo, al leer el libro se puede apreciar la dedicación del autor por guiar el trabajo del joven. La idea era sencilla, necesitaba vivir y conocer el mundo, apreciar la vida en todas sus dimensiones, le explica que debe encontrar y comprender el amor, la soledad, la muerte y el dolor, sólo así le será posible escribir sobre ellos con la belleza y realidad que la poesía exige.
Sin embargo el mensaje no es únicamente para aquéllos que se sientan llamados o atraídos por la poesía, es para cualquiera que pretenda desarrollar algo artístico y único, incluso sirve para interpretar a la vida misma, dentro de aspectos que pueden parecernos efímeros pero forman parte de un todo.
Cartas a un Joven Poeta es un escrito que únicamente incluye las 10 cartas, es un libro ligero pero no por eso carece de importancia, incluso se puede leer y apreciar mejor el mensaje de acuerdo al momento que se vive, se comprenden nuevos significados.
El libro se puede encontrar en librerías y también en Internet de forma gratuita y lista para descargar o leer en algunas páginas o blogs.