Tensión. Agentes de las fuerzas del Ministerio del Interior ucraniano hacen guardia frente a unos manifestantes pro Unión Europea cerca de una barricada erigida por los manifestantes en los alrededores del palacio presidencial, en Kiev, Ucrania.
La Policía ucraniana empezó a dispersar a los manifestantes opositores que bloquean el acceso a los edificios del Gobierno en Kiev e irrumpió en la sede del principal partido opositor, Batkivschina (Patria).
"Las fuerzas de seguridad han comenzado a expulsar a los manifestantes de las calzadas de las calles (...) donde el tráfico estaba bloqueado. Por el momento, no se ha producido ningún choque violento", informó un portavoz policial.
El objetivo de la acción es liberar el acceso a los edificios públicos, que los opositores tienen parcialmente bloqueados desde hace dos semanas, para garantizar el normal funcionamiento de las instituciones estatales.
Además, la Policía justificó su acción en las numerosas protestas de los vecinos de la capital que se quejaban de la imposibilidad de desplazarse en sus coches, debido al bloqueo de la calzada de las principales calles del centro de Kiev.
Efectivos del Ministerio del Interior también comenzaron a retirar las barricadas y tiendas de campaña levantadas por los opositores en las inmediaciones del edificio del gabinete de ministros.
Ayer se cumplió el plazo que la Policía de la capital ucraniana había dado a los manifestantes para desalojar el Ayuntamiento y desbloquear el Gobierno, la Administración Presidencial y la Rada Suprema (Legislativo).
La oposición aseguró que los efectivos antidisturbios recurrieron a la violencia para dispersar a los manifestantes y entraron por la fuerza en la sede de la formación política de la encarcelada exprimera ministra Yulia Timoshenko.