Elementos de la Policía Estatal realizaron un paro de labores para exigir que las jornadas labores no excedan lo estipulado, el pago de un bono de 600 pesos y el cese de "maltratos" por parte de los superiores de la corporación.
Durante la mañana de este lunes, aproximadamente 200 policías se congregaron en la sede de la Policía Estatal, localizada en la capital, y denunciaron el incremento en las horas de trabajo.
Asimismo, agregaron, han sido víctimas de maltrato por parte de sus jefes y no les ha sido liquidado un bono especial de 600 pesos.
Al sitio arribó Raúl Gómez, subsecretario de la Secretaría de Seguridad Pública, quien encabezó -de manera privada- las negociaciones con los inconformes.
La dependencia emitió un comunicado en el que aseguró que revisará "caso por caso" para detectar cuántos elementos no han recibido su pago y determinar los motivos de este faltante.
"A nadie se le va a quitar lo que la Ley y el Reglamento marcan como salario y compensación", cita la misiva.
Además, agrega la ficha informativa, se revisará el esquema de horario aunque subrayaron que puede haber modificaciones según las necesidades operativas y demanda para cuidar a la ciudadanía.
Por último, respecto al maltrato ejercido desde los directivos, la Secretaría pidió a los elementos documentar los casos y revelar el nombre de los involucrados a fin de proceder contra ellos.