Corbata de moño. Perry Ellis juega con este accesorio en su nueva campaña.
Antes reservada sólo para los smokings, el corbatín o corbata de moño se ha convertido en uno de los complementos más utilizados por los caballeros que gustan del glamour en esta temporada. Así, este pedazo de tela atada alrededor del cuello de manera simétrica, se ha visto tanto para la oficina como para cenas casuales y fiestas informales.
Su antecedente se remite al Siglo 17 en Prusia cuando los mercenarios croatas utilizaban una especie de bufanda alrededor del cuello para ligar la abertura de sus camisas. Pronto, este método se adaptó a las clases altas en Francia, principal campo de la moda, de donde pasó a ser un elemento indispensable en el vestuario de la nobleza y los literatos y poetas.
"Hoy se llevan en seda, poliéster, algodón o mezclas de tejidos sintéticos y se llevan en tonos lisos o estampados sobre todo con amibas o cuadros. Lo más importante es que han trascendido de ser sólo un complemento de gala a adornar casi cualquier ocasión a menos de que sea una demasiado informal", afirma el diseñador Guillermo León.
Aunque existen dos versiones, el lazo para atar y las que vienen ya armadas, éstas últimas son las más socorridas por los hombres de hoy, ya que son más prácticas y fáciles de utilizar.
Aquí, le mostramos algunos ejemplos, ideales para estas fiestas.
Algunas ideas para llevarlas con:
* Un saco informal y jeans
* Un blázer de terciopelo
* Un suéter de punto ligero
* Un chaleco con rombos
* Una camisa a cuadros si el moño es liso
* Una camisa estampada si el moño tiene motivos gráficos
