Practican. En algunas escuelas alumnos participan en programas para cuidar bebés de juguete.
Entre 2000 y 2010 los embarazos entre niñas y jóvenes de primaria o secundaria crecieron en más de 149 mil casos, con lo que se incrementaron las causas de deserción escolar o el impedimento para permanecer en la educación básica, de acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP).
La SEP elaboró un diagnóstico para definir los criterios del programa de becas de apoyo a la Educación Básica de Madres Jóvenes y Jóvenes Embarazadas (Promajoven) para 2013, con el fin de sustentar la distribución de 130 millones de pesos a través de becas a quienes, en esa condición, desean continuar en la escuela.
A partir de las cifras obtenidas en los censos generales de Población y Vivienda elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) o cifras del Consejo Nacional de Población (Conapo) entre el año 2000 y 2010, la SEP encontró que mientras en el año 2000 se estimó en 135 mil 287 mujeres las que se embarazaron y no concluyeron su educación básica, para el año 2010 la cifra ascendió hasta 284 mil 519 estudiantes, "incrementándose la población objetivo en términos reales".
Para enfrentar esa situación, la SEP otorgará este año becas de 850 pesos durante cada uno de los diez meses del ciclo escolar a jóvenes de entre 12 a 19 años para que no abandonen la escuela y puedan concluir sus estudios.
En el año 2012, la SEP apoyó a 49 mil 460 niñas madres o jóvenes, lo que representó apenas 17.38% de la población objetivo.
Para el año 2013, a iniciativa del Ejecutivo, la Cámara de Diputados aprobó un presupuesto de 130 millones de pesos para Promajoven -22 millones de pesos más que en 2012-, de los que sólo 120 millones 76 mil pesos se destinarán a becas y el resto a gastos de administración.
Desde que en 2004 surgió el Promajoven, de acuerdo con las reglas de operación, se acumularon 81 mil 256 estudiantes que recibieron una beca y se convirtieron en mamás en más de una ocasión.
Para 2013, los retos que la SEP advierte son "el incremento en la cobertura de atención en zonas rurales e indígenas y el mayor número de madres jóvenes que permanecen en el Programa hasta concluir sus estudios de educación básica, en las entidades federativas con menor índice de desarrollo humano". Prevé impulsar el logro académico, sumando redes de apoyo y atendiendo al contexto social, cultural y lingüístico.
"Con el número de becas para este año se prevé incrementar el número de años de escolaridad y la conclusión de la educación básica de las madres jóvenes embarazadas".