Desconocimiento. Por desconocimiento estiman que dentro de seis años aumentará el número de jóvenes con ETS.
En alrededor de 6 ó 7 años en México habrá un aumento en jóvenes con alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS), advirtió Josefina Lira Plascencia, coordinadora de la Clínica de Medicina del Adolescente del Instituto Nacional de Perinatología.
Ese panorama se espera debido a que las actuales prácticas sexuales de los adolescentes representan un gran riesgo para adquirir Virus de Papiloma Humano (VPH), Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), además de Hepatitis B y C.
La especialista prevé el aumento con base en datos como los de la Ensanut 2012 que señala que 79 por ciento de los jóvenes de entre 12 y 19 años saben que el condón masculino se emplea para evitar un embarazo o una infección de transmisión sexual, sin embargo, muy pocos lo utilizan de manera habitual.
En la primera relación sexual no lo utilizó el 15 por ciento de los hombres ni el 33 por ciento de las mujeres. Y en su última relación sexual la gran mayoría de jóvenes la tuvo sin protección, pues no utilizó condón el 79 por ciento de los hombres, ni el 46 por ciento de las mujeres.
Por otro lado, datos del Centro Nacional de Vigilancia Epidemiológica y Control de Enfermedades indican que la incidencia de VPH en la población de 15 a 19 años va en aumento, pues en 2005 tenían la infección 10 de cada 100 mil jóvenes y en 2010, 12 de cada 100 mil.
La candidiasis urogenital fue la más frecuente en ese lapso. En 2005, 220 de cada 100 mil jóvenes de 12 a 19 años la tenían y en 2010, ya eran 240 por cada 100 mil.
Las prácticas del sexo anal y oral también se han incrementado porque se asumen como seguras para evitar el embarazo, explicó la especialista.
"En unos años va a ser un problema enorme, si en el país no se toman específicamente medidas de educación con campañas masivas de comunicación, los jóvenes van a seguir teniendo estas conductas de riesgo porque no se les alerta del riesgo que implican estas prácticas no coitales", enfatizó Lira Plascencia.
Por otra parte, Tirso Clemades, presidente de la asociación civil Cuenta Conmigo, donde se ofrece atención especializada en VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), advierte que las infecciones más frecuentes que atienden son por VPH, candidiasis, clamidia, gonorrea y VIH. "En nuestra institución, donde llegan varios menores de edad que ejercen la prostitución o son hombres que tienen sexo con hombres, las infecciones más frecuentes que vemos son por VPH, candidiasis, clamidia, gonorrea y VIH", comentó
"Estamos muy atrás en el tema (de prevenir ITS) porque no hay clínicas gubernamentales para la atención de los adolescentes y llegan a la adultez colmados de infecciones", agregó.
Para el médico, una barrera importante para allegar la información necesaria a los jóvenes es la regulación y normativa que hay al respecto, pues en los centros escolares, por ejemplo, se requiere de autorización de los padres para que los adolescentes menores de edad reciban información sobre sexualidad y métodos anticonceptivos.
De hecho, realizarse la prueba de detección de anticuerpos contra el VIH en México, los menores de 18 años de edad requieren del aval de sus padres o tutores.
Lira Plascencia y Clemades coinciden en la urgencia de proveer educación sexual a los adolescentes.
"No tengo empacho en decirlo, las otras administraciones dejaron muy de lado la educación sexual en nuestros jóvenes, nos consta que no se habló de nada, que no se hizo mucho y ahí están las cifras de embarazo en adolescentes, apostaron a la abstinencia (...) pero también hay que hablarles a los que no están de acuerdo con ella", dijo la ginecóloga.