Déficit. Analistas señalan que México es el segundo importador de maíz en el mundo, con importaciones de 9 millones de toneladas.
La producción de maíz lleva prácticamente sin crecer, en promedio desde el año 2000, debido entre otras causas, a la lenta adopción de tecnología, variaciones climáticas, y la sustitución por otros cultivos con mayor rentabilidad, afirmó el analista de Rabobank, Pablo Sherwell.
En entrevista destacó que México es el segundo importador de maíz a nivel mundial, aunque en el largo plazo, nuestras importaciones estarían entre 8.5 y casi 9 millones de toneladas y para 2020 oscilarían los 8.3 millones de toneladas de importaciones.
"Ese nivel es menor al que llegamos a tener en el año 2011-2012, cuando importábamos alrededor de 11.2 millones de toneladas de maíz".
En el largo plazo, previó, este nivel disminuirá y en promedio importaremos alrededor de 150 mil toneladas de maíz blanco, muy por debajo del nivel que tuvimos durante los períodos 2010-2011 y 2012, aunque por arriba de nuestro histórico.
"Sin lugar a dudas, la adopción de semillas mejoradas llevaría a México a niveles de producción y a un mercado más competitivo y lo dejaría aislado de la volatilidad, que no siempre la vamos a tener, pero México es un país tomador de precios en la parte de maíz y contaría con una formación de precios más eficiente si incrementa la producción", recomendó Sherwell.
Refirió que hay regiones como Sinaloa, con rendimientos promedio de 10 toneladas por hectárea, superior a los promedios de muchas regiones en Estados Unidos y del mundo, llegar a ese número, quiere decir que se alcanzan niveles más altos que en las principales regiones productoras del país.