Me permito hacer una observación importante acerca de los tíos. El cariño de los sobrinos hacia ellos es normal que no se pueda igualar al que se debe tener a los padres, aunque éstos no expresen sus afectos como los tíos. Los padres están inmersos en sus preocupaciones de sacar adelante a la familia y no se dan el tiempo de dar amor, y esto se puede tomar como que los tíos los quieren más por sus atenciones. Esta situación origina conflictos en la dinámica familiar, muy importantes porque se maneja en la problemática de los afectos, los cuales no deben aflorar en negativo. La realidad es que la presencia de los tíos puede coadyuvar de un modo muy positivo en el desarrollo físico y emocional de los pequeños. El éxito radica en que cada uno de los roles se manejen adecuadamente; los padres como padres y los tíos como tíos. Recuerden que todo redunda en beneficio de esos niños, adolescentes y jóvenes que juegan el papel de "hijos-sobrinos".
Les recuerdo mi correo: cotygube63@hotmail.com
