Puertas del paraíso

El concepto de parque nacional es relativamente joven, si tomamos en cuenta que esta denominación se empleó a partir de la fundación de la primera área de este tipo (en Estados Unidos) en el siglo XIX. En menos de 150 años se han creado más de 7,000 parques nacionales distribuidos a lo largo de los cinco continentes, con el propósito de proteger a plantas y animales, y mantener su hábitat a salvo del deterioro ambiental. Son asimismo espacios poseedores de un descomunal encanto, tanto que resulta difícil hacer una selección de los mejores. Hoy le presentamos 10 de ellos, todos indiscutiblemente fastuosos y recomendados por millones de personas que año con año atraviesan miles de kilómetros para apreciar de cerca estos tesoros de la Naturaleza.

PARQUE NACIONAL KAKADU

AUSTRALIA

En su paisaje domina la exuberancia del color verde, que surge de las más de 2,000 especies de plantas que resguarda. Aquí se combinan áreas boscosas con manglares, pantanos, montañas y playas. Su misma situación geográfica lo ha favorecido con un clima siempre agradable, lo cual facilita visitarlo en cualquier momento del año. Es preciso decir que en este punto del planeta se perciben no cuatro, sino seis estaciones (en la más fría, la temperatura mínima promedia los 17 °C).

Kakadu es hogar de imponentes cascadas y del South Alligator, un río subtropical. Hablamos de un parque nacional realmente inmenso. Es además uno de los pocos en ostentar el título de Patrimonio de la Humanidad en categoría mixta: no sólo por su riqueza natural, sino también cultural, al ser hogar de los aborígenes kakadu, una de las más antiguas culturas vivientes sobre la Tierra. De hecho el parque es propiedad de los bininj/mungguy (en conjunto con Parks Australia), quienes están totalmente involucrados en la administración de la zona y vigilan la conservación de las antiquísimas pinturas rupestres (se estima que tienen al menos 50 mil años) en los sectores de nombre Nourlangie Rock y Ubirr.

Existe la opción de contratar una excursión acuática para recorrer los humedales de Kakadu. Éstos son conocidos por su abundancia en aves; hay miles (algunos afirman que millones) de ellas, pertenecientes a más de 280 especies, y su canto es tan característico y cautivador, que cuentan con su propia app en iTunes (Kakadu birds).

Pero los animales más temidos y buscados en Kakadu son los cocodrilos, por igual los ‘dulces’ y los marinos o ‘salados’. Estos últimos son los de mayor tamaño en el mundo, llegan a medir más de seis metros.

Hay aparte más de 100 tipos de reptiles y especies tan extrañas como el equidna de hocico corto o el moloch. Kakadu funge como casa de 33 especies amenazadas (algunas en peligro de extinción, otras con altas posibilidades de serlo), incluyendo algunos tipos de tiburón, búho y tortuga; en las llanuras de Bamurru pueden observarse búfalos.

Las rutas para caminata tienen opciones en terreno plano y en monte, y según el sendero escogido demandan desde unas horas hasta un día entero, incluyendo la noche. Para navegar se puede contratar un bote, respetando las indicaciones del conductor para no exponerse a los cocodrilos.

Ubicación: A 200 kilómetros al este de la ciudad de Darwin, en la región de Top End (Territorio del Norte).

Extensión: 19 mil kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: 170 mil.

Para quienes llegan: En las cercanías del parque hay varios hoteles, desde tipo resort hasta lo más básico. Dentro y fuera del parque se tienen áreas de camping que van de lo elemental (gratuitas) a lo sofisticado (con tarifa).

PARQUE NACIONAL TIERRA DEL FUEGO

ARGENTINA

El Parque Nacional Tierra del Fuego se ubica en el suroeste de la provincia del mismo nombre, en la Patagonia argentina: la región más austral del bosque andino-patagónico y del mundo.

En algún tiempo su territorio fue hogar de la tribu de los yámana. Se instituyó como parque nacional en 1960 y abarca una fracción de la Cordillera de los Andes. Es así que en su territorio se mezclan los paisajes montañosos con bosques de oscuro follaje, los lagos glaciares como el Roca, y también las costas marinas. Se trata de una región húmeda y fría aun en el verano, cuando las temperaturas rondan los 10 °C.

El Parque Nacional Tierra del Fuego es muy frecuentado por los amantes del trekking, conocido por sendas que varían tanto en longitud como en nivel de dificultad. Sin excepción, cualquiera de sus recorridos es pleno de belleza e interés. Algunos son emblemáticos, como la excursión a la Laguna Negra, de aguas asombrosamente oscuras por la presencia de turbales (restos vegetales acumulados en depresiones submarinas); el recorrido al mirador, que ofrece una visión panorámica de toda la bahía; o el paseo a la castorera, en donde puede admirarse un sistema de diques erigido por castores que, dicho sea de paso, no son una especie originaria de este territorio y por lo tanto su presencia ha tenido un impacto ambiental. Por el contrario, entre los animales propios de Tierra del Fuego figuran el zorro colorado fueguino, la nutria de agua dulce y el huanaco (especie similar a la llama). En el agua sobresalen los ‘bosques’ de cachiyuyo, un tipo de alga de gran tamaño.

Parte del atractivo de viajar a este parque es la posibilidad de hacerlo a bordo del Tren del Fin del Mundo, el cual sale desde la ciudad de Ushuaia, con una escala en la cascada Macarena. Llama la atención que originalmente (a principios del siglo XX) fue construido como transporte para presos. En la actualidad conserva la apariencia clásica propia de las máquinas de vapor, si bien cuenta con todas las comunidades y varios vagones de lujo.

Ubicación: A 12 kilómetros de la ciudad de Ushuaia.

Extensión: 630 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: 250 mil.

Para quienes llegan: Dentro del parque existen tres áreas de acampe gratuitas (sin servicios), y una más con costo, dotada de todo tipo de comodidades.

PARQUE NACIONAL FIORDLAND

NUEVA ZELANDA

Hay puntos del planeta que parecen extraídos de un sueño. Nueva Zelanda es uno de ellos y sus parques nacionales son la más clara muestra. Entre las diferentes opciones a lo largo del país, el Parque Nacional Fiordland sobresale todavía más por su indescriptible esplendor. Incluso hay quienes no titubean en referirse a él como “el más hermoso de todo el mundo”.

El parque recibe su nombre por los 14 majestuosos fiordos que se ubican en él (un fiordo es una especie de valle ‘tallado’ entre las montañas, por un glaciar). Algunos pueden conocerse mediante largas caminatas, mientras que a otros sólo es posible tener acceso en alguna de las embarcaciones al servicio de los turistas. Si bien cualquiera de ellos es digno de recorrerse, entre los más apreciados por los visitantes están los bautizados como Doubtful Sound y Milford Sound, que puede atravesarse en kayak.

El Fiordland es el más grande de los parques de Nueva Zelanda y uno de los menos explorados del orbe, lo cual le ha permitido conservarse más intacto que la mayoría.

Además de las formaciones de agua, aquí la vegetación es la protagonista. En general el paisaje está dominado por espléndidas hayas y el musgo que cubre piedras y caminos, los cuales se mantienen verdes casi en cualquier época junto a otras 700 plantas endémicas, gracias a que aquí llueve 300 días al año.

Igualmente hay gran variedad de pájaros, algunas muy atípicas como el kakapo o el takahe, dos aves que no vuelan. Los tipos de fauna y flora en general tuvieron su origen en el desaparecido súper continente de Gondwana y sólo persisten aquí. De hecho, en los fiordos habitan los braquiópodos, animales muy primitivos cuyo organismo no ha sufrido cambio alguno en más de 300 millones de años.

Fiordland posee la población de coral negro más grande del mundo, con más de siete millones de colonias de tal especie. Del mismo modo sus reservas marinas refugian a pingüinos azules y al tawaki, un pingüino crestado, así como delfines nariz de botella y lobos marinos.

Quienes disfrutan la aventura deben visitar Hollyford Track, una ruta de 56 kilómetros que comprende dos lagos, el Alabaster y el McKerrow. Se transita en cuatro días y entre sus atractivos incluye cruzar algunos tramos mediante puentes colgantes, tres de ellos hechos sólo con alambre.

Ubicación: En la zona de Te Wahipounamu (Patrimonio de la Humanidad), que a su vez está situada en la parte suroeste de la Isla Sur. Cerca se encuentra la aldea de Te Anau y la ciudad de Queenstown queda a 150 kilómetros.

Extensión: 12,500 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: Alrededor de 500 mil.

Para quienes llegan: Hay cabañas en el interior del parque así como áreas para acampar, y diferentes tipos de alojamiento en Te Anau.

PARQUE NACIONAL SERENGUETI

ÁFRICA

Es inmenso y no podía ser de otro modo, ya que muchos de sus habitantes son especialmente grandes: aquí hay elefantes, hipopótamos, búfalos, rinocerontes, jirafas; también hienas. Desde luego, en este paraíso tanzano abundan los felinos: leones, leopardos, chitas. Todos conviviendo en la placidez de las llanuras, con la sabana o los pantanos de fondo. Pero además Serengueti es escenario de un fenómeno que año con año deslumbra a quienes tienen oportunidad de presenciarlo: el paso migratorio de miles de cebras, gacelas y ñus, los cuales desfilan por su territorio en filas que suman millares de ejemplares y constituyen un muy singular peregrinaje que puede presenciarse entre diciembre y julio.

Dicho de otro modo, en este parque nacional confluye el tipo de animales que cualquiera querría ver en primera fila en una visita al continente africano. Es por ello que el Serengueti es uno de los destinos favoritos para realizar un espectacular safari fotográfico. De hecho, el objetivo de crear el parque fue proteger a toda esta fauna, en especial a las especies más acosadas por los cazadores (elefantes, rinocerontes, búfalos, leopardos, leones).

La vegetación no podía quedarse atrás. No hay muchos árboles pero son majestuosos y las acacias conviven con los baobabs, inconfundibles por el grosor de su tronco e inolvidables gracias a su mención en el clásico literario El Principito. Aun así, más que los árboles resalta el terreno cubierto de hierba, verde claro o amarillo según la estación, e invariablemente aparentando tener una extensión infinita. De hecho la palabra serengeti significa ‘planicie interminable’ en lengua masai. La majestuosidad de este territorio y sus habitantes puede ser observada mediante un paseo en globo aerostático.

El Serengueti, Patrimonio de la Humanidad, es el parque nacional de mayor antigüedad en África, y también el más popular. Se caracteriza por su clima cálido. En promedio el termómetro se mantiene cerca de los 25 grados.

Ubicación: En Tanzania, muy cerca de la frontera con Kenia; la ciudad más cerca es Arusha y queda a una distancia aproximada de 130 kilómetros.

Extensión: Más de 14 mil kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: Arriba de 90 mil.

Para quienes llegan: En Arusha hay toda clase de alojamientos. En el parque, cabañas y áreas para acampar.

PARQUE NACIONAL YELLOWSTONE

ESTADOS UNIDOS

Al hablar de parques nacionales es indispensable comenzar por el de Yellowstone, el primero en obtener esta designación no solamente en los Estados Unidos sino en el mundo entero. Gracias a su fundación en 1872, otras naciones siguieron el ejemplo y comenzaron a fundar otros espacios de su tipo.

Pero más allá de tal honor, Yellowstone sobresale por algunas características especiales que sin duda vale la pena conocer. Alberga un volcán activo y más de 300 géiseres (fuentes termales que hacen erupción cada tantos minutos), lo que equivale a dos terceras partes de los que existen (y el más famoso de todos: el Old Faithfull), lo cual la convierte en la zona con la mayor concentración de fenómenos geotérmicos en todo el planeta. Esa fue una de las principales razones para que obtuviera el nombramiento de Patrimonio de la Humanidad en 1978. Además posee hermosos manantiales de agua caliente cuyas temperaturas propician la abundancia de microorganismos, los cuales dan a sus pozas una apariencia única pues en una misma piscina natural conviven asombrosas mezclas de colores.

Mención especial merece la parte conocida como Mammoth Hot Spring, compuesta por una serie de ‘terrazas’ de aguas termales que forman un paisaje sin duda extraordinario. Y por supuesto, el Gran Cañón de Yellowstone, labrado durante las inundaciones de las últimas glaciaciones, caracterizado por sus paredes de roca amarilla.

También hay lagos y saltos de agua que roban el aliento por su magnificencia y si bien algunos son de apenas unos cuantos metros de altura, la cascada Lower Falls supera los 90: casi dos veces más que las cataratas del Niágara.

Este deslumbrante bosque en el que proliferan las coníferas sirve de hogar a 67 especies de animales entre las que se encuentran osos negros, ciervos, pumas, bisontes, coyotes, más de 300 tipos de aves y otros, incluyendo dos especies amenazadas (el lince de Canadá y el oso grizzli) y una en peligro de extinción (el lobo gris).

Yellowstone permanece abierto todo el año, aunque muchos recomiendan visitarlo durante el verano para así disfrutar de un mejor clima (en invierno la temperatura promedio es de cero a -5 °C).

Ubicación: Se extiende sobre tres estados: Wyoming (96 por ciento de la superficie), Montana (tres por ciento) e Idaho (uno por ciento).

Extensión: alrededor de 9,000 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: 3,300 millones.

Para quienes llegan: Yellowstone posee nueve hoteles, 12 áreas para acampar y zonas para picnic.

PARQUE NACIONAL SHIRETOKO

JAPÓN

Pocos ecosistemas son tan ricos como el del Parque Nacional Shiretoko. Aquí, en un mismo territorio, puede admirarse el paso de águilas y búhos manchú (en peligro de extinción) y el tranquilo andar de zorros rojos y osos pardos, todos conviviendo apenas a metros de leones marinos, focas manchadas y ballenas.

El parque se encuentra en el sector más al norte de Japón, en la península homónima; Shir-etok significa ‘fin de la Tierra’.

Shiretoko es hogar de la cascada termal Kamuiwakka, alimentada por aguas de hasta 30 °C que brotan de la ladera del monte Iouzan, un volcán activo. Otro emblema del lugar son las cascadas de Oshini-Koshin, las cuales alcanzan una altura de 80 metros.

Hay vistas que sólo pueden apreciarse colocándose a nivel del océano, por eso los visitantes suelen utilizar los servicios de embarcaciones como el buque Aurora que se desplaza bordeando los acantilados. Es importante decir que en Shiretoko la mayor parte de los atractivos demandan un buen trecho de caminata, parte del plan de conservación es que no haya muchos accesos para vehículos. Quienes gusten de escalar, pueden aprovechar los senderos de ascenso al monte Rausu; cabe mencionar que en éste suele encontrarse nieve aún a mediados de julio.

En tierra hay especies endémicas como la violeta de Kitami. Con el fin de cuidar a esta y otras plantas, así como a los animales, parte del parque debe recorrerse a través de una pasarela de madera elevada a tres metros del suelo. Su majestuosa estructura mide 800 metros y termina justo en el lugar conocido como Shiretoko Goko, cinco cuerpos de agua que se unen y forman una mano.

Lo usual es que el acceso a Shiretoko se cierre durante un largo periodo pues al acercarse el invierno las fuertes nevadas complican el acceso; las fechas varían cada año según las estimaciones meteorológicas, pero en promedio el parque puede permanecer abierto sólo durante siete meses. Recién reanudado el acceso y durante algunas semanas es posible emprender una caminata sobre lagos congelados. El trayecto dura alrededor de dos horas y tiene un costo de aproximadamente 5,000 yenes (60 dólares) e incluye la renta de un traje especial que permite sumergirse en los sitios donde el agua ya está a la vista.

Ubicación: Península de Shiretoko, al noroeste de la isla de Hokkaido, en la parte más al norte del archipiélago nipón.

Extensión: Poco más de 380 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: Dos millones.

Para quienes llegan: En Shiretoko no está permitido acampar, pero en el puerto de Rausu, sí (en la misma península), y hay asimismo hoteles.

PARQUE NACIONAL BANFF

CANADÁ

Quienes lo conocen coinciden en que vale la pena desplazarse a la provincia de Alberta sólo para admirar personalmente las postales vivientes del Parque Nacional Banff, el colorido de sus flores y bosques, así como los inolvidables glaciares de vibrante tono turquesa. Magníficos osos negros y grizzli, alces y borregos cimarrones son algunos de los seres que habitan en sus parajes.

Fue fundado en 1885, por lo cual es el tercero más longevo del mundo. Y aunque no es el más grande de los célebres parques de las Montañas Rocosas canadienses, a menudo se habla de él como la joya de dicho territorio.

Uno de los puntos de visita obligados de este paraíso es el lago Louise (conocido como “la joya de las Rocosas”), situado a los pies del glaciar Victoria; la belleza de este cuerpo de agua es tal que se ha vuelto una de las imágenes más difundidas cuando se trata de promover los paisajes del país; hay quienes cuestionan la autenticidad de las fotos tomadas aquí, pues no creen que exista tanta perfección.

También son célebres el lago Moraine y el Peyto (ambos de tipo glaciar), y el Minnewanka, en donde es posible practicar buceo y recorrer las ruinas submarinas de un viejo centro vacacional que quedó sumergido tras la construcción de las represas que elevaron el nivel del agua. El paisaje en el cañón Johnston, con sus cascadas rodeadas de abetos, es también para dejar boquiabierto a cualquiera.

Y si bien numerosos parques nacionales son visitados mayormente por amantes del senderismo, Banff podría ser uno de los predilectos ya que cuenta con más de 1,600 caminos señalizados y catalogados por niveles de dificultad para la seguridad de los excursionistas.

Cualquier época del año es un festín visual en Banff, si bien las estaciones favoritas para muchos son el otoño, cuando todos los árboles adquieren tonalidades cálidas; y el invierno, época en que todo se convierte en un escenario de cuento navideño. Es importante decir que Banff es un parque habitado, ya que la villa de Lake Louise y el pueblo (conocido por sus centros de esquí activos de noviembre a mayo), se encuentran dentro del territorio.

Ubicación: A 130 kilómetros al oeste de Calgary. Colinda con tres parques nacionales: Jasper, Yoko y Kootenay.

Extensión: Poco más de 6,600 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: Tres millones.

Para quienes llegan: Tienen zonas para acampar con tienda o tráiler; en el pueblo de Banff hay hoteles de diferentes categorías y toda clase de facilidades turísticas.

PARQUE NACIONAL CASCADA DE BASASEACHI

MÉXICO

Quienes lo conocen, afirman que la magnificencia de sus parajes lo hace comparable con sitios como el Gran Cañón de Colorado. Situado en el corazón de la Sierra Madre Occidental y fundado en 1981, el Parque Nacional Cascada de Basaseachi tiene como núcleo de atracción la caída de agua homónima, cuyos 246 metros la convierten en la más alta de todo el territorio mexicano, una de las más impactantes del continente y la número 28 en el ámbito internacional.

Su nombre viene de la palabra rarámuri baseseachi, ‘lugar de cascadas o de coyotes’, ya que además de la citada catarata hay otros saltos espectaculares como el que se forma durante época de lluvias (julio a octubre) en la portentosa barranca de Candameña: la cascada Piedra Bolada, de 453 metros. Otra muy atractiva es la Abigail, la cual permite recorrerla por detrás y entender mejor los misterios de estas cortinas de agua. La espectacularidad de cada uno de esos paisajes puede admirarse a plenitud desde diferentes miradores naturales (el más frecuentado: La Ventana), con accesos muy bien delimitados, aunque es recomendable gozar de una buena condición física para recorrerlos. Quienes así lo prefieren, pueden cubrir la zona a caballo.

Es refugio para animales como el venado cola blanca, el oso negro, pumas, nutrias de agua dulce, linces, venados cola blanca, águilas y otras aves. Dotado de cientos de árboles (encinos, pinos, cipreses, abetos) y otras especies que incluyen uno que otro agave, orquídeas y magnolias, este parque nacional es cada vez más frecuentado por los escaladores profesionales de todo el mundo, quienes acuden para probar su habilidad en alguna de sus más de 50 rutas. O enfrentarse a retos ya legendarios como la espectacular Peña del Gigante: una pared totalmente vertical de 897 metros, medida que la convierte en la más alta de su tipo en el país y le confiere un aspecto impresionante. Asimismo empieza a cobrar auge la práctica de salto libre.

Vale la pena decir que la revista México Desconocido ha destacado que el de Basaseachi es uno de los tres sitios imperdibles, entre la amplia variedad de parques nacionales que hay en nuestro país.

Ubicación: En el municipio de Ocampo, Chihuahua, en la Sierra Madre Occidental; son casi 300 kilómetros desde Chihuahua capital.

Extensión: Casi 500 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: 12 mil.

Para quienes llegan: El hospedaje recomendado con más frecuencia es el de Rancho San Lorenzo, donde hay cabañas y zona de acampar; o bien en las cabañas El Rincón de Basaseachi.

PARQUE NACIONAL SUIZO

SUIZA

Pensar en Suiza evoca paisajes de indudable belleza. Imagine entonces cómo lucirá su único parque nacional (y el más antiguo de Europa Central, establecido en 1914). Al estar situado en los Alpes, su principal distintivo son las montañas de más de 3,000 metros de altura. Y aunque no es muy extenso comparado con otros parques, cada centímetro se queda grabado en la memoria de quienes le visitan.

Además de incontables pinos hay especies florales de gran belleza como la flor de Edelweiss o flor de las nieves (Leontopodium alpinum), exclusiva de las praderas alpinas. Aunque todo el año hay algo especial para ver, la mejor época para admirar la vegetación es en junio y julio.

Aquí viven cabras montesas, marmotas, liebres, venados rojos, zorros y aves de muy distintos tipos (arriba de 100 variedades). Lamentablemente a principios del siglo XX los cazadores acabaron con los osos pardos, los lobos y los linces que vivían en la zona. No obstante, algunos especialistas confían en que al menos los osos podrían volver a residir aquí.

Este es quizá uno de los parques que vigilan con más celo la interacción de los visitantes y la Naturaleza; de hecho está prohibido desviarse fuera de los caminos prediseñados y se insta a los visitantes a no cortar flores. Así, la mejor manera de disfrutar el paisaje es adentrándose en él por medio de una de sus 21 rutas, muy bien definidas, que se extienden por 80 kilómetros. Cabe decir que las hay aptas para todo tipo de personas, otras con grado de dificultad avanzado y por lo tanto reservadas para expertos en senderismo, recomendación que debe tomarse en cuenta especialmente por la altitud. Los amantes de las caminatas largas pueden emprender el ascenso hasta la meseta de Macun (a 2,600 metros), distintiva por sus 23 lagos.

Otra alternativa es recorrerlo en bicicleta; de hecho el parque incluyó recientemente un tramo de la Alpine Bike, la primera ruta nacional de BTT (bicicleta todoterreno), que es asimismo la más larga del mundo.

Ubicación: En el valle de la Engadina (frontera con Italia), en la zona conocida como cantón de Grisones, al este de Suiza. El acceso es por la villa de Zernez.

Extensión: 172 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: 150 mil.

Para quienes llegan: Dentro del parque hay un refugio de montaña (Chamanna Cluozza) y un hotel.

LAKE DISTRICT NATIONAL PARK

INGLATERRA

Si alguna vez ha visto en el cine un paisaje inglés que le ha quitado el aliento, hay muchas posibilidades de que esté viendo algo filmado dentro del Parque Nacional del Distrito de los Lagos.

Entre los parques nacionales del orbe, el de Lake District constituye un caso excepcional pues gran parte de su territorio pertenece a la propiedad privada. De hecho en él hay más que algunas fincas: alberga las ciudades de Ambleside, Keswick y Windeermere, además de varios caseríos y granjas. La población total en el sector del parque supera los 42 mil habitantes, comprometidos al cuidado de este maravilloso lugar que, como su nombre lo dice, tiene como mayor tesoro numerosos lagos de diferentes dimensiones y profundidades (si bien sólo el Bassenthwaite es llamado oficialmente lago, los demás se denominan ‘aguas’), todos valiosos por la riqueza de su vida acuática. De hecho, varios de estos cuerpos de agua poseen la denominación de áreas especiales de conservación por su tipo de fauna. En otros, se puede contratar un paseo en kayak o canoa.

No solamente se trata del parque nacional más grande de Inglaterra, sino que también posee la montaña más alta, Scafell Pike, y el lago más profundo: Wastwater.

Año con año millones de personas llegan hasta este paraje que alguna vez fue territorio de los celtas, para deleitarse con la espectacularidad de la Naturaleza y con sus tesoros culturales, que incluyen más de 14 mil sitios arqueológicos y antiquísimos monumentos construidos con piedras como Castlerigg Stone Circle, Threlkeld Settlement o Cockpit Stone Circle. Hay tumbas vikingas las cuales se calculan cerca del siglo X, y otras tantas construcciones de origen muy antiguo.

El atractivo de este territorio es tal que ha sido incluido en la lista de ‘los sitios que deben visitarse al menos una vez en la vida’ de National Geographic Traveller Magazine. Por su carácter atípico, el parque no cuenta con una zona delimitada como acceso o salida, ni es preciso cubrir una cuota para entrar, aunque sí es importante respetar los puntos que son de propiedad privada. Sin duda la mejor forma de conocerlo es caminando; hay senderos con distinto grado de dificultad.

Ubicación: En el condado de Cumbria (noroeste de Inglaterra) dentro de la región conocida también como Distrito de los Lagos o Lakeland.

Extensión: 2,300 kilómetros cuadrados.

Promedio anual de visitantes: 16 millones.

Para quienes llegan: Hay hoteles de todas las categorías, incluyendo los de tipo boutique, así como establecimientos bed and breakfast, zonas para acampar y espectaculares viviendas en renta.