Una protesta más.
La encarcelada integrante del grupo punk ruso Pussy Riot, María Aliójina, se declaró ayer en huelga de hambre en protesta por no poder asistir a la vista judicial sobre la concesión de la libertad condicional. Aliójina, que se encuentra internada desde octubre pasado en una penitenciaría para mujeres de la ciudad de Perm, anunció su decisión al tribunal Bereznikovski por videoconferencia, según las agencias rusas. La presa había solicitado al tribunal permiso para participar en la vista, como ocurriera el mes pasado con la otra encarcelada integrante de Pussy Riot, Nadia Tolokónnikova, que se encuentra en una prisión de la república de Mordovia. Seguidamente, anunció que se niega a tomar parte en la vista a distancia e incluso prohibió a su abogado que participe en la vista, tras lo que el juez aplazó la sesión hasta hoy. Aliójina ha tenido problemas con los funcionarios desde que ingresó.