El encargado de la Delegación Federal del Trabajo en Coahuila, Ignacio Puga Zamorano, informó que de las 34 empresas mineras que el año pasado fueron cerradas, cerca de la mitad han sido reabiertas, pues indicó han logrado regularse con la normatividad.
Señaló que de los 34 centros que fueron suspendidos el año pasado, ya han sido abiertos nuevamente cerca de la mitad; la otra parte sigue clausurada porque las empresas no han cumplido.
“Muchos simplemente han abandonado los predios y hasta no haber un responsable la autoridad no se puede liberar nada”, dijo.
Puga Zamorano indicó que los motivos principales por lo que los pozos de tiro vertical son clausurados, son debido a que no cuentan con una segunda salida de emergencia o con el equipo de protección adecuado para el personal, asimismo tienen problemas con la ventilación, o en la medición de gas a distancia.
“Vigilamos sobre todo los más peligros que son los denominados de tiro vertical o pozos de carbón; el año pasado se suspendieron actividades en alrededor de 34 centros, pero hasta el momento cerca de la mitad han abierto”, dijo.