Guerra civil. Un soldado atrincherado en la ciudad de Alepo, espera la llegada de más insurgentes.
Rebeldes sirios capturaron un barrio estratégico cerca del aeropuerto internacional de Alepo, en el norte del país, lo que le dio a las fuerzas opositoras el control de una importante carretera que el gobierno ha utilizado para transportar suministros y refuerzos a las tropas que combaten en la acosada ciudad. En otros puntos del país, los combates prosiguieron sin amainar, lo que provocó la muerte de más de 60 personas, dijeron activistas.
Las fuerzas leales al presidente Bashar Assad y los rebeldes han estado en un virtual estancamiento en torno de Alepo, el mayor centro urbano y comercial de Siria, y en otras áreas del norte desde el verano. Siete meses después, los rebeldes controlan buena parte de la ciudad y los suburbios, incluso algunas bases del ejército. Pero de todos modos no han podido superar la mayor potencia de fuego del régimen.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que los rebeldes capturaron el área el sábado después de varios días de intensos combates. Los rebeldes han controlado enclaves en las afueras de las principales ciudades, incluso cerca de Damasco, pero han sido bombardeados y desalojados poco después por la aviación y la artillería.
En un esfuerzo para revertir los avances rebeldes en Alepo, aviones del régimen bombardearon, dijo el Observatorio.