¿Cómo actúas cuando nadie te observa? ¿Haces lo correcto cuando nadie te ve?
Hablemos de la integridad
Qué fácil es hacer lo correcto cuando uno cuenta un auditorio que sirve de testimonio que reconoce y elogia las buenas acciones o los sacrificios que se hacen. La seguridad, el autoestima y todos los adjetivos calificativos que fortalecen a la persona se solidifican con cada acción correcta, debida y acertada.
Sin embargo ¿qué pasa cuando uno tiene la opción de actuar correctamente, hacer sacrificios y dejar cosas valiosas simplemente porque eso es lo correcto y lo debido? Aun en la obscuridad o en el anonimato cuando nadie reconozca y posiblemente ni siquiera se dé cuenta de que se hizo esa gran acción.
Difícil, pero no es imposible, de creer que existe una persona que hace lo debido sin dudar, ayuda con sinceridad, da sin pedir nada a cambio, que está dispuesta a ofrecer soporte a la gente que lo necesita simplemente por el placer de ayudar, de servir y de ser mejor aun cuando sus acciones pasen desapercibidas.
Luisa es una mujer que siempre está buscando oportunidades para ayudar en su comunidad, cocina, visita a los enfermos, trae líderes espirítales, participa en todo lo que puede, es una buena amiga, realmente ella, tiene un buen espíritu.
Elda una de las amigas más cercanas de Luisa, sin dudar pensó inmediatamente en llamar y pedirle apoyo cuando recibió la terrible noticia de la enfermedad de su nieto. Como era de esperarse Luisa amablemente escuchó su mortificación y su angustia; para sus sorpresa al poco tiempo que terminó de contar el terrible diagnóstico de él bebe, Luisa miró el reloj y dijo… Qué pena me tengo que ir me esperan en una cita… dejándola simplemente con las lágrimas en los ojos y el corazón destrozado.
Elda no pudo creer lo que pasó, su amiga, el ejemplo de la bondad no tuvo el corazón para poder compartir el dolor, se fue y dejó a esta mujer con un sentimiento de desaparición espantoso. Elda sintió un vacío y dolor muy fuerte primero por su nieto y segundo por la decepción de su amiga.
Poco tiempo después, Elda recibió flores y pasteles que cocinó Luisa en su grupo de amigas que apoyan a la comunidad. Elda no necesitaba flores o pasteles hechos por mujeres que buscan a quien servir, ella necesitaba una amiga en privado, en silencio que la consuele y la apoye justo cuando nadie las mira.
La receta
La integridad que no se disuelve
Ingredientes:
1 taza de genuinidad; sinceridad con uno mismo.
1 taza de responsabilidad; deber y obligación para hacer lo debido a pesar de todo.
1 cucharada de compromiso moral; con los valores propios.
2 rebanadas acciones; constantes y congruentes a los principios que se aluden.
1 tableta de humildad; sencillez y simplicidad para actuar.
3 gotitas de amor a la vida; gusto y cariño por la humanidad.
Recomendación del chef: Hoy me declaro una persona libre, que actúo con integridad y reconozco que hacer lo correcto en toda ocasión es una cuestión de dignidad y compromiso personal un busco reconocimientos, sino encontrar paz emocional que me haga sentir mejor.
Modo de preparación:
1.- Hay que actuar como si alguien nos estuviese observando siempre; hacer lo correcto en todo momento a pesar de las circunstancias define y fortalece la imagen propia, otorga paz, tranquilidad y sobretodo un sentimiento de congruencia y lealtad con uno mismo.
2.- Toda persona tiene la capacidad y la posibilidad de actuar en función a los valores positivos que nutren su ser y mejoran su ámbito. La oportunidad para elegir y hacer lo correcto es una prueba continua para mejorar el carácter personal y siempre está proporcionada a la capacidad personal y a las circunstancias específicas que se presentan, nunca se trata de actuar como otra persona.
3.- No se trata de hacer más de lo que se necesita o actuar como un santo; simplemente se trata de estar consciente que se debe de actuar como si alguien nos estuviera observando siempre. De hecho, somos un ejemplo, aun cuando nadie se encuentra a nuestro lado.
"Ser íntegro quiere decir que se es una persona completa, que actúa correctamente, con sencillez, en silencio y con gusto, no es cuestión de cuestionamiento sino de convicción".
www.recetasparalavida.com