El presidente francés, François Hollande, excluyó ayer convocar un referéndum sobre el proyecto de ley de su Gobierno para autorizar el matrimonio y la adopción homosexual, tal como le pide la oposición conservadora.
Hollande manifestó que cumplirá su "compromiso" que asumió "ante los franceses" a favor de esta reforma durante una reunión con parlamentarios franceses.
"Conozco las sensibilidades sobre este tema, son diversas, y además el domingo se desarrolló una manifestación, que califiqué de consistente. La respeto, pero ahora le toca intervenir al Parlamento", declaró.