Mientras los gobiernos de Guerrero y Oaxaca consideran leyes para revertir la evaluación de maestros en la reforma educativa, el presidente Enrique Peña Nieto advirtió que no aceptará retrocesos en los cambios emprendidos en el sistema educativo.
Durante un foro para definir la agenda educativa del Plan Nacional de Desarrollo, Peña Nieto dijo que la reforma constitucional que hace obligatoria la evaluación docente tiene que avanzar ahora con las leyes secundarias.
"El gobierno de la República no va a permitir retrocesos en su aplicación", dijo.
Es la primera vez que Peña Nieto se ha referido a las iniciativas en Guerrero y Oaxaca para mitigar los efectos de la evaluación obligatoria.
Aunque los gobiernos de ambos estados ya descartaron "contrarreformas", los maestros en esas entidades continúan sus manifestaciones y se encuentran en paro.
Peña Nieto dijo que "ningún intento de presión pondrá en riesgo la formación de las nuevas generaciones".
El mandatario recordó que la reforma es producto del acuerdo entre partidos y que tendrá como beneficio que la evaluación será un instrumento para elevar la calidad de la enseñanza.
El secretario de Educación, Emilio Chuayffet, dijo que los estados que enfrentan a maestros en paro deben aplicar la ley y despedir a los que falten injustificadamente durante varios días.
