Denuncia. Niños 'legisladores' denunciaron el rezago educativo y la pobreza que existe en Coahuila.
"No estoy aquí para hablar de mí, ni de los niños que sí tenemos derechos, sino para pedir, exigir por una vida digna para esos niños que carecen de todo, desde un hogar, hasta el derecho a la educación, y quienes por lo mismo nunca han asistido a la escuela", señaló la niña Valeria Gómez Molina de Cuatrociénegas, en su condición de diputada en el Octavo Parlamento Infantil que sesionó este jueves.
Valeria forma parte del grupo de niños coahuilenses seleccionados de las distintas regiones del estado para representar a sus compañeros de quinto y sexto grado escolar.
En el parlamento infantil hubo propuestas para que "los maestros se involucren más en sus grupos por medio de trabajos en equipo para detectar posibles casos de bullying en las aulas y escuelas" y para lograr "la creación de más centros comunitarios en donde se prepare a los adultos sobre cómo se debe educar a los hijos y reorientarlos de manera más positiva".
La diputada infantil Jéssica Portales González, de San Juan de Sabinas, planteó la necesidad de que las empresas mineras reforesten las zonas que devastan, tras extraer el carbón del subsuelo en aquella región.
"Hablaré de lo que se ve a simple vista en Santa María, en el Coyote, en el libramiento de Rosita y en Cloete, relacionado con los tajos. En la visita que le hicimos a la Compañía Minera de Rosita, el jefe de Ecología nos dijo que ellos tenían muchos árboles destinados para los dueños de los tajos cuando terminaran la explotación del carbón, pero nadie ha sembrado nada", denunció.
La mesa directiva del Congreso Infantil estuvo representada por Arleth Vitela Aguilar como presidenta; Paola Vidales Esquivel y Jéssica Portales González, como vicepresidentas, así como Fernando Darío Rocha y Valeria Monserrat Gómez Molina, como secretarios.