Desatada la versión de que el PRI reformaría sus reglas para darle luz verde a sus legisladores ante una eventual propuesta de elevar el Impuesto al Valor Agregado en el marco de la reforma hacendaria en puerta, acaba de aparecer un estudio en que se rechaza tajantemente la posibilidad.
Firmado por el que fuera subsecretario de Egresos de Hacienda, Santiago Levy, el análisis señala que el problema del país se centra en la evasión del tributo y su gran cantidad de exenciones y tratamientos especiales.
De hecho, la recaudación del gravamen al consumo en países que mantienen tasas más bajas a la nuestra llega a ser del doble en proporción del Producto Interno Bruto.
Así, en Nicaragua, con una tasa de 15%, un punto menos a la de México, se recauda el equivalente al 7.4% del PIB… frente al 3.8% de nuestro país.
Más aún, Paraguay, con una tasa de 10%, similar a la que existía en el país durante el sexenio zedillista, alcanza también una recaudación del 7.4% del Producto Interno Bruto.
En la lista están Bolivia, con la misma tasa y una recaudación de 6.5%; Ecuador, con una tasa de 12% y una cosecha similar.
En abundancia, Colombia, también con 16% de IVA, recauda el equivalente al 5.3% del valor de la producción del país.
El caso más espectacular es el de Brasil, cuya cosecha alcanza el 12.9 del PIB, sólo que con una tasa de 22%; en contraste, Argentina, con sólo el 21, recauda el 8.1, porción idéntica a la de Chile, con una tasa de 19.
Uruguay recauda el 8.8 con un IVA de 22%.
Desde otro ángulo, México tiene la más baja productividad en relación al PIB, bajo la fórmula de medir la recaudación como porcentaje del PIB por punto de tasa de IVA.
Estamos hablando de 0.24, frente al 0.75 de Paraguay; el 0.59 de Brasil; el 0.54 de Ecuador, o el 0.49 de Nicaragua.
De acuerdo al que fuera director general del Instituto Mexicano del Seguro Social y primer presidente de la Comisión Federal de Competencia, el potencial recaudatorio del país sin exenciones al gravamen al consumo podría llegar hasta el 10.5% del Producto Interno Bruto. Ahora que aun manteniendo las exenciones, la posibilidad llegaría al 6.88.
De acuerdo al análisis ("El potencial recaudatorio del IVA"), nuestro país tiene, además, la más baja productividad en relación al consumo, medida ésta como el porcentaje del consumo por punto de tasa del gravamen.
El resultado es de 0.36, con la novedad de que en Paraguay se alcanza el 0.90; en Brasil el 0.89; en Ecuador el 0.70; en Chile el 0.77 y en Argentina el 0.84.
México, pues, tiene la menor productividad del IVA en América Latina, traducida como eficacia recaudatoria.
Dicho con todas las letras, la recaudación del país no es baja porque su consumo en proporción al PIB sea menor que en otros países, ni porque la tasa general sea baja. La diferencia la hacen los tratamientos especiales y la evasión.
Aunque muchos países tienen bienes exentos o con tasa cero, el nuestro es el que gana todas las medallas.
Existe tasa cero en alimentos básicos y procesados, y en medicinas e insumos y servicios para el sector agrícola.
Adicionalmente, están exentos del gravamen los servicios de salud, educación, transporte público e intermediación financiera.
En paralelo, el IVA que se cobra en las fronteras tiene una tasa de 11%.
Casi la mitad de la base del IVA, pues, está sujeta a un tratamiento especial.
Desde otro ángulo, los elevadísimos niveles de informalidad que enfrenta el país dificultan la fiscalización, lo que se refleja en una elevada evasión.
Esta, de acuerdo al estudio, alcanza el 45%.
De acuerdo al que fuera director general del Instituto Mexicano del Seguro Social y primer presidente de la Comisión Federal de Competencia, el potencial recaudatorio del país sin exenciones al gravamen al consumo podría llegar hasta el 10.5% del Producto Interno Bruto.
Ahora que aun manteniendo las exenciones, la posibilidad llegaría al 6.88.
La nación que tiene el menor número de exenciones, prácticamente cero, es Chile, alcanzando una evasión de 28%, lo que anula la teoría de que a mayores privilegios mayor evasión.
Una carta más a la baraja.
BALANCE GENERAL
Ocho años después del inicio de un pleito por incumplimiento de contrato planteado por la empresa Corporación Mexicana de Mantenimiento Integral, filial de la estadounidense Kellogg Brown & Root contra Pemex, ésta le acaba de ganar un round.
La paraestatal logró que se anulara un laudo arbitral que le obligaba a pagar 293 millones de dólares más intereses, al considerarse que la revocación del contrato otorgado a la quejosa no era un acto sujeto a arbitraje.
La acción de autoridad se dio al incumplir la contratante las condiciones fijadas para la construcción de dos plataformas marinas.
La resolución judicial se había dado en octubre de 2011 en México, validándose finalmente en un tribunal de los Estados Unidos.
OTRA VEZ DE SWAAN
La noticia es que la Comisión Permanente del Congreso ordenó a la Auditoría Superior de la Federación investigar dos contratos otorgados por la Comisión Federal de Telecomunicaciones por presuntas irregularidades.
La flecha apunta directo al presidente del organismo, Mony De Swaan.
Los contratos de la discordia se le otorgaron a la Universidad Autónoma del Estado de México y a la empresa Enapsys.
No es la primera vez que existen sospechas de manejos irregulares de contratos por parte del presidente del organismo. Se ha hablado de que favorece a amigos y cercanos.
Otra vez, pues, en el ojo del huracán.
FEMSA Y ARCA POR TODO
A la callada, Coca Cola Femsa (KOF) y Arca Continental tienen ya en su poder el 89% de las plantas del refresco de cola en el país, en un escenario en que la pelea por el 11 restante se vuelve feroz.
Estas las mantienen sólo seis empresas independientes, de las 13 que se tenían.
De hecho, hoy mismo están en la pelea por Bepensa, una firma instalada en la península de Yucatán, a la que se ubica como el tercer embotellador del país.
Femsa acaba de adquirir al grupo Yoli que opera en el sur del país.
Anteriormente había integrado a su causa al Grupo Tampico, Cimsa y Fomento Queretano, con en lo que alcanzó el 57% del mercado.
albertobarrancochavarria0@gmail.com
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