No es usual la renuncia de un papa. Han pasado casi 600 años desde 1415 cuando Gregorio XII dimitió para resolver el "cisma de occidente" en que tres pontífices se disputaban la jefatura de la Iglesia Católica.
Solamente otros dos papas han renunciado en ejercicio de su ministerio: Benedicto IX en 1044 (aun cuando volvería a ser papa en 1045 sólo para ser depuesto en 1046) y Celestino V (san Celestino) en 1294, quien no se consideró apto para dirigir los asuntos terrenales de la Iglesia.
Benedicto XVI, quien cumplirá 86 años el próximo 16 de abril y que habría llegado a ocho años en el solio pontificio el 19 de abril, parece haber estado preparando su renuncia en los últimos años. En 2010 le dijo al escritor Peter Seewald en el libro-entrevista Luz del mundo: el papa, la Iglesia y los signos de los tiempos que un obispo de Roma podía dimitir "en un momento de serenidad, no en el momento del peligro".
¿Es éste un momento de serenidad? Los escándalos agobian a la Iglesia, especialmente por los casos de pederastia entre sacerdotes que deberían ser los principales guardianes de los niños. Estos casos no sólo han afectado la estatura moral de la Iglesia sino también sus arcas. Las demandas judiciales en Estados Unidos han quebrado a parroquias y a diócesis. Hay quien piensa, sin embargo, que temas complicados, como la reestructuración de la Legión de Cristo, se encuentran ya suficientemente avanzados como para dejarlos a un sucesor.
Otros retos son más fundamentales para la Iglesia Católica, una organización que ha subsistido a lo largo de dos mil años. En el mundo hay 1,196 millones de católicos según el Anuario pontificio. La mayor fe del mundo ha sido alcanzada ya en número de adherentes por el Islam. Hay otros mil millones de cristianos en el mundo, pero no son católicos.
El número de católicos no está disminuyendo en este momento, pero el Islam sí crece con vigor. El catolicismo pierde adherentes en Europa y Latinoamérica, aunque avanza en África y Asia. Alrededor del 17.5 por ciento de los habitantes del mundo son católicos bautizados. Este porcentaje se ha mantenido estable en los últimos años. Muchas personas nominalmente católicas, sin embargo, no son realmente practicantes. Acuden a misa solamente en bautizos, bodas y funerales y no aceptan los mandatos de la Iglesia en temas como el comportamiento sexual. La apatía de los católicos, particularmente en Europa, contrasta con el entusiasmo con el que los musulmanes se entregan a su fe.
El número de sacerdotes ha venido creciendo desde el 2000. En 2010 había 412,236, un poco más que los 410,593 de 2009. El número, sin embargo, es todavía pequeño para los que se requieren ante el gran número de católicos en el mundo, especialmente en África y Asia.
La Iglesia Católica ha tenido tres pontificados conservadores consecutivos: el de Paulo VI, el de Juan Pablo II y el de Benedicto XVI (el de Juan Pablo I fue demasiado breve para dejar huella). Hay que remontarse al pontificado de Juan XXIII para encontrar a un papa realmente innovador. Con su Concilio Vaticano II Juan XXIII logró cambios muy importantes en la liturgia, la teología y la filosofía católicas que si bien fueron controvertidos, y llevaron a la separación de algunos grupos conservadores, han terminado por ser aceptados por los católicos y han mejorado la institución.
La Iglesia Católica es por naturaleza conservadora. Pero hay temas como la ordenación de mujeres y el celibato de sacerdotes que tarde o temprano tendrán que ser considerados. De otra manera la Iglesia quedará cada vez más aislada en el siglo XXI. Al nuevo papa le tocará tratar de lograr este aggiornamento.
DEVALUACIÓN
El gobierno venezolano finalmente no tuvo opción. Ha anunciado una devaluación de 31 por ciento del bolívar que se aplicará este miércoles 23 de febrero, una vez que concluya el feriado por el carnaval. Esto aumentará la inflación y dejará más vacíos de lo que ya están los anaqueles de supermercados y mercados.
Twitter: @sergiosarmient4