Policías. Miles de policías resguardaron el recinto donde se llevó a cabo la subasta del yacimiento petrolero.
Al menos seis personas resultaron heridas con balas de goma, durante enfrentamientos entre la Policía brasileña y manifestantes que protestan por la licitación de un gigantesco yacimiento petrolífero submarino en Río de Janeiro.
Los manifestantes, de organizaciones sindicales y sociales, llegaron ayer por la mañana a las inmediaciones del hotel Windsor, en Barra de Tijuca, donde esta tarde se efectuará la licitación del campo de Libra, con reservas por 12 mil millones de barriles de petróleo.
El gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, acusada por los trabajadores petroleros de privatizar la industria, desplegó más de un millar de efectivos para custodiar la zona, los que usaron gases lacrimógenos y balas de gomar para dispersar a los manifestantes.
La estatal Agencia Brasil informó ayer lunes que los incidentes comenzaron después que manifestantes derribaron vallas colocadas por las fuerzas de seguridad, entre ellos efectivos del Ejército que llegaron en la medianoche pasada al lugar.
El yacimiento de Libra está ubicado a unos 180 kilómetros de la costa, frente a Río de Janeiro y se extiende en un área de mil 500 kilómetros cuadrados, donde se estima existen reservas de entre ocho mil y 12 mil barriles de petróleo.
TRABAJADORES EN CONTRA
Los empleados de la petrolera brasileña Petrobras afirmaron hoy que Brasil quedó un 60 % más pobre tras concederle a un consorcio integrado por cinco empresas los derechos para la explotación de Libra, el mayor yacimiento petrolero hasta ahora descubierto en el país.
"Antes de la subasta, Brasil era dueño del 100 % del mayor campo de petróleo descubierto en el país. Ahora, el pueblo brasileño quedó un 60 % más pobre", aseguró Joao Antonio de Moraes, presidente de la Federación Única de los Petroleros (FUP), citado en un comunicado divulgado por esta central sindical que agrupa a la mayoría de los trabajadores de Petrobras.
De acuerdo con el líder sindical, tras la subasta, el país se quedó "en la mejor de las hipótesis" con el 40 % de la riqueza petrolera, ya que tal es la participación de la estatal Petrobras en el consorcio que se adjudicó la licitación.
POR CIENTO
más pobre quedará Brasil con la subasta, señalan.