Certificación. El Instituto Nacional de Migración señaló que uno de cada cuatro de sus empleados no pasa los examenes de confianza.
Uno de cada cuatro servidores públicos del Instituto Nacional de Migración (INM) que son sometidos a exámenes de control y confianza...¡reprueba!
De acuerdo con una solicitud de información pública entregada por el organismo, de 2010 a mayo de 2013 se sometió a evaluación a 2 mil 108 empleados, de los cuales mil 571 aprobaron, y 537 reprobaron.
El Reglamento de La Ley de Migración establece que la certificación del personal es requisito indispensable para su ingreso, permanencia o promoción en el instituto.
El aspirante o empleado debe superar los exámenes médico, toxicológico, psicológico, poligráfico, de antecedentes y entorno socioeconómico, y otros que se consideren necesarios.
El documento del INM indica que 25 servidores fueron examinados en 2010, y de esa cifra, 10 reprobaron.
En 2011, de 171 evaluados, 30 reprobaron; en 2012, de mil 663 evaluados, 441 no acreditaron, y en lo que va del año, de 231 sometidos a pruebas, 56 no tuvieron éxito. Según el reporte, actualmente 467 personas están en proceso de certificación en el Centro de Evaluación y Control de Confianza del INM, creado formalmente en febrero de 2011.
"El proceso de certificación que practica este centro tiene por objeto comprobar que los servidores públicos o aspirantes dan debido cumplimiento a los principios de certeza, legalidad, objetividad, imparcialidad, eficiencia, eficacia, profesionalismo, honradez, lealtad, disciplina y respeto a los derechos humanos", puntualiza el organismo.
Pese a este esfuerzo de certificación, en siete años al menos 344 servidores públicos de este instituto han sido sancionados administrativamente por incurrir en irregularidades durante el desempeño de su labor. La cifra más alta de penalidades ocurrió en los primeros cinco meses de este año.
El Órgano Interno de Control indicó que en 2006 fueron 78 los castigados; en 2007, 27; en 2008, 10; en 2009, 4; en 2010, 52; en 2011, 56; en 2012, 43 y en 2013, 74.
Los actos que realizaron van desde omitir su declaración patrimonial, adjudicar indebidamente a proveedores, obtener ganancias con la compra de productos, contraer adeudos no justificados para la institución, introducir aparatos prohibidos a estaciones migratorias, omitir sellar pasaportes, presentar facturas falsas o infligir maltratos a extranjeros.
"Permitió y consintió que un extranjero fuera separado del resto de los extranjeros asegurados, ingresándolo sólo a otra celda, en la que lo tuvieron esposado a la parte inferior de los barrotes sin que el mismo pudiera moverse", detalla la sanción de 2013 hacia el encargado de despacho de la Subdirección de Regulación y Control Migratorio, según se ejemplificó.
Las sanciones pudieron ser amonestación, suspensión, inhabilitación o destitución a agentes migratorios, jefes, subdirectores, directores e incluso delegados locales o regionales.