Incremento. Cada Gobierno Federal aportó un recurso para terminar la supervía, lo que provocó que el costo de la misma aumentara.
La tardanza en la construcción de la autopista Durango-Mazatlán provocó que el costo total de la obra fuera superior al contemplado originalmente.
Esto, debido a la actualización de precios de los materiales, explicó Federico Martínez, presidente de Tradeco, la constructora a cargo del tramo de 67.7 kilómetros entregados ayer.
"El diferencial viene por la actualización de costos que marca la Ley de Obras Públicas, realmente nosotros no tuvimos variaciones en ese sentido", dijo después de participar en la ceremonia de inauguración.
Aunque no detalló a cuánto asciende el diferencial, explicó que los materiales no cuestan lo mismo cuando se hacen los cálculos para la licitación que cuando la obra se concluye.
La edificación de esta obra carretera comenzó en 2001, con el libramiento de Durango y la autopista Villa Unión-Concordia, cercana a Mazatlán, y se prolongó prácticamente 12 años.
Sin embargo, fue hasta ayer cuando el tramo completo de 230 kilómetros fue abierto de punta a punta.
Los tres mayores tramos carreteros fueron licitados durante el sexenio de Felipe Calderón, pero el concurso para construir el puente el Baluarte se lanzó todavía durante la administración de Vicente Fox.
Esta estructura, considerada una de las de mayor complejidad por la propia Secretaría de Comunicaciones y Transportes, forma parte del tramo de 67.6 kilómetros que entró en operación este jueves, en él también están incluidos el puente el Carrizo y el túnel el Sinaloense.
El costo de este tramo asciende a 18 mil 600 millones de pesos, 65 por ciento de los 28 mil 600 millones de pesos que costó toda la autopista.
Aunque el plan original contemplaba que la autopista estuviera lista antes de que concluyera el sexenio de Felipe Calderón, la Administración de Enrique Peña Nieto tuvo que invertir más de 5 mil 300 millones de pesos para concluir precisamente este tramo.
Federico Martínez calculó que el pago de los trabajos se realizara en un período de tres meses a un año, lo cual es considerado normal en la industria, y negó que el Gobierno federal haya retrasado los pagos.
Los Gobiernos de Durango, Sinaloa, Chihuahua, Coahuila, Zacatecas, Nuevo León y Tamaulipas que forman el Corredor Económico del Norte, confiaron en que esta autopista detonará la actividad económica de la región, que es hogar de 21 por ciento de la población y genera alrededor de 20 por ciento del Producto Interno Bruto nacional.
Reclaman ejidatarios
"Nosotros somos los dueños de la tierra", gritaron ejidatarios al presidente de la República, Enrique Peña Nieto (EPN), al final de la ceremonia de inauguración del último tramo de la supercarretera Durango-Mazatlán.
Un grupo de comuneros afectados con la construcción de esta vía de comunicación esperaron a que concluyera el evento para entregarle un documento al jefe del Ejecutivo Federal, al tiempo que le reclamaron el no haberlos mencionado en su discurso durante el acto con que formalmente da inicio el aforo vehicular.
En entrevista, el representante legal de los campesinos, Ernesto Pérez Virgen, manifestó que que durante el breve acercamiento que se tuvo con EPN, éste se disculpó por la omisión, que según dijeron, el Presidente justificó fue de los redactores del discurso.
En tanto que reconocieron al gobernador de Sinaloa por referirse a las organizaciones gremiales que coadyuvaron en la construcción de la supercarretera, entre las que de alguna manera se sienten incluidos.
Por último, sostuvo que en esta carretera se construyeron algunos puentes que aún hoy van hacia voladeros o hacia la montaña; es decir, que no van a ningún lado.
