Rey Ordónez (centro) junto a sus hermanos Didiel (i) y Juan Carlos. Rey Ordóñez, de vuelta en Cuba 20 años después
Con nerviosa expectativa, el ex pelotero cubano Rey Ordóñez regresó a la isla 20 años después de desertar, aprovechando la nueva ley migratoria y con la calurosa acogida que recibió del pueblo está ansioso por regresar pronto y con más tiempo.
"Soy puro nervio desde que me dieron el permiso de entrada y el pasaporte, sentía mucha ansiedad y llegué aquí con todo apretado no sólo el corazón, pero me voy muy contento y con muchos deseos de regresar para estar más de tres días", expresó Ordóñez.
Vestido con un pulover blanco y un short beige, Ordóñez conversó en un hotel céntrico de la capital cubana, donde se tomó numerosas fotos con varios aficionados que lo reconocieron y lo saludaron con alegría.
"Desde la llegada al aeropuerto fue de maravilla, la gente me conoce, se mostró atenta, cariñosa, me sorprendí porque pasaron veinte años y realmente yo no jugué mucho en Cuba, pero me voy a ir muy contento y con muchos deseos de regresar para estar más tiempo", comentó Ordóñez, quien arribó el jueves para una estancia de cuatro días.
Ordóñez es el segundo pelotero cubano considerado "traidor" que visita la isla, dos meses después que lo hizo el estelar lanzador José Ariel Contreras. Ambos aprovecharon la nueva ley migratoria en vigor desde el 14 de enero que eliminó las restricciones para salir y entrar a la isla. En el caso de los deportistas que desertaron se les autoriza regresar cuando pasen ocho años de la deserción.
El ex paracorto de 42 años "desertó" de un equipo Cuba universitario en 1993 durante un torneo en Buffalo, al norte de Nueva York. Jugó con los Mets de Nueva York entre 1996 y 2002 con los que ganó tres veces el Guante de Oro (1997, 1998 y 1999), después integró los elencos de Tampa Bay y los Cachorros de Chicago.
En Cuba, Ordóñez defendió la camiseta de los equipos capitalinos Metropolitanos e Industriales, éste último como suplente de otro estelar, Germán Mesa.
"Me retiré hace siete años y ahora sólo estoy vinculado al beisbol por mi hijo de 20 años porque lo ayudo en las prácticas, pero veo cómo la isla sigue siendo un país de beisbol, todo el mundo lo sigue, están contentos cuando me ven, es increíble", comentó.
El estelar pelotero contó que tuvo un emotivo encuentro con Lázaro Vargas, ex tercera base de Industriales cuando Ordóñez jugaba, y en la actualidad manager de ese equipo.