Sabías que...
¿GEMELOS?: NO
Suele decirse que todos tenemos un gemelo por ahí, y el fotógrafo canadiense François Brunelle se ha empeñado en comprobarlo mediante un asombroso proyecto, al cual ha denominado I’m not a look-alike! Y es que Brunelle se propuso encontrar y retratar a 400 individuos (200 parejas) que sin ningún tipo de parentesco, e incluso nacidos en países distintos, compartan una apariencia tan semejante que casi parezcan gemelos. Hasta ahora ha logrado la mitad de su objetivo y el plan es que una vez conquistado, el artista espera publicar un libro con la totalidad de las imágenes. Mientras tanto, si usted ya se ha topado con alguien tan parecido que cualquiera los podría confundir, puede escribir a info@francoisbrunelle.com y aplicar para ser uno de los modelos.
PI-PINTURA
Los coleccionistas están dispuestos a pagar sumas exorbitantes por las obras de Andy Warhol, sobre todo si en vez de su firma contienen parte del artista... aunque sea pipí. Tal es el caso del lienzo que aquí se aprecia, el cual Warhol elaboró con su propia orina, recientemente subastado por la casa Christie’s de Londres en más de 93 mil dólares, cifra que rebasó por mucho a otros artículos como los retratos de Truman Capote y de Farrah Fawcett, que apenas alcanzaron los 20 y 30 mil dólares respectivamente. Se sabe que a finales de los setenta el llamado ‘padre del arte pop’ realizó varios cuadros por el estilo, conocidos como piss paintings, para lo que en ocasiones pedía una ‘pequeña’ contribución a sus amigos.
MÚSICA VEGETAL
¿Se imagina una melodía interpretada con zanahorias, calabazas, sandías, pimientos o berenjenas? Entonces sólo tiene que adquirir Onionoise, Automate o Gemise, los tres álbumes de Das erste Wiener Gemüseorchester: la Orquesta Vegetal de Viena. Se trata de un inusual conjunto de 10 músicos fundado en 1998, que con frecuencia recorre algunos países de Europa y Asia, sorprendiendo audiencias con un repertorio de piezas originales cuyas influencias abarcan del género clásico al electrónico. Su extravagancia va más allá: antes de cada concierto, los mismos integrantes eligen y compran los vegetales para elaborar los instrumentos, cuya frescura es importante pues al final de la velada son transformados en sopa.