El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su esposa Michelle, saludaron hoy a los miles de asistentes que se congregaron para presenciar el tradicional desfile en la avenida Pensilvania. (EFE)
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su esposa Michelle, saludaron hoy a los miles de asistentes que se congregaron para presenciar el tradicional desfile en la avenida Pensilvania, con motivo del inicio de su nuevo gobierno.
Obama, que horas antes juramentó para un segundo mandato en un día frío y nublado, salió por momentos de la limosina para caminar tomado de la mano de la primera dama, que lució un abrigo azul marino del diseñador estadunidense Thom Browne.
El vicepresidente Joseph Biden también salió brevemente del vehículo con su esposa Jill, e incluso se acercó a saludar a un grupo de niños.
“Lo más lindo fue ver a las entidades militares”, dijo la boliviana Tunia Bascopé, quien asistió al desfile con su esposo Carlos y su hija de 4 años.
Señaló, sin embargo, que su “decepción” fue que no pudo ver a Obama cuando salió de la limosina presidencial Cadillac One, a la que también llaman “la bestia”.
El mandatario saludó al público en su trayectoria del Capitolio, donde juramentó, rumbo a la Casa Blanca donde presenció el desfile en una tribuna blindada construida especialmente para la ocasión.
El peruano Antonio García, que asistió al desfile con su sobrina Rosa Gómez, sostuvo por su parte que el mensaje del desfile para Estados Unidos y el mundo es que “le dijimos no al miedo, y ahora estamos avanzando”.
Gómez dijo por su parte que lo que más le impresionó fue la banda de Chicago, una de las numerosas bandas y grupos de escuelas y universidades, así como de entidades militares, que llegaron de todo el país para participar el desfile.
