La justicia deportiva se impuso en la colocación de los aspirantes a la corona de la Liga Mexicana de Beisbol. Ya sé que me van a tildar de loco, pues ni Sultanes de Monterrey ni Tigres de Quintana Roo finalizaron como líderes de su respectiva zona, pero sí fueron los equipos con mejor planeación y con más talento en la actualidad. La regularidad fue el sello de estas escuadras a lo largo de la temporada, y aunque Tigres pasó momentos difíciles durante la campaña, que redituaron en el despido del manager Matías Carrillo, el empaque del equipo ganador les valió para mantenerse siempre en zona de playoff.
Los de bengala utilizaron una fórmula ganadora que ha sido prácticamente infalible en los últimos años: la base de jugadores que militan en los Yaquis de Ciudad Obregón. La tribu de Cajeme ha sido tricampeón en la Liga Mexicana del Pacífico, dirigidos por Eddie Díaz han ganado también dos de las más recientes tres ediciones de la Serie del Caribe. Los cuates Contreras, Doug Clark, Agustín Murillo, Alfredo Amézaga, como peloteros y hasta Francisco "Chino" Minjarez como directivo, gozaron de campeonatos en LMB y LMP durante el último año deportivo.
Minjarez seguramente fue parte importante del cambio en el que Tigres se hizo de los servicios de Karim García, procedente de los Sultanes de Monterrey. La relación de Minjarez con el toletero obregonense es muy cercana, pues Karim ha sido refuerzo recurrente para el clásico caribeño, e incluso se logró canjear al ex ligamayorista para que juegue en el equipo de su tierra a partir de la próxima temporada, procedente de los Naranjeros de Hermosillo.
García servirá a la organización de los Yaquis, aunque Minjarez no podrá hacerlo, pues fue suspendido de cualquier puesto en la LMP, presumiblemente, por autorizar bonos extras de dinero a los peloteros de su equipo, aunque la liga lo manejó como "actos en contra de los intereses de la Liga Mexicana del Pacífico y sus demás asociados". Con todo y eso, Minjarez no se distrajo de su trabajo con Tigres, y se tomaron las decisiones importantes en el momento oportuno.
Tigres tuvo lesionados, baja asistencia de aficionados, pitcheo que batalló por momentos (como todos los equipos de la liga), pero su mérito es el haber sorteado con éxito esas dificultades. Hicieron 40 carreras en los cinco juegos de la serie final, y el responder a la hora buena siempre irá de la mano con el éxito. Sultanes no contó con buen pitcheo abridor, y ese fue su pecado. Lástima por nuestros laguneros, Alan Guerrero y Juan Pablo Menchaca, quienes hicieron una buena temporada, y deberán esperar para obtener el gallardete.
Ya comienza el último mes de la temporada regular en las Ligas Mayores, con los Yankees empujando a marchas forzadas para mantenerse con vida, en una férrea lucha con Tampa, Oakland, Baltimore y Cleveland por el puesto de comodín. Mientras en la Liga Nacional los Piratas de Pittsburgh son la historia a seguir, con casi dos décadas sin marca ganadora, pelean por meterse a playoffs. Nuestros lanzadores mexicanos han lucido, Jorge de la Rosa y Miguel Ángel González siguen en contienda, mientras que Adrián González es la estrella de los Dod-gers que son la "cenicienta" del viejo circuito; será un gran cierre de campaña. Buen fin de semana, y recuerden disfrutar la vida, hasta que caiga el out 27.
Aarón Arguijo G.
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