A punto estamos de conocer a los protagonistas del bien llamado "Clásico de Otoño", la Serie Mundial, evento emblemático del mes de octubre, y que siempre deja algún recuerdo en la vida de todo buen aficionado a su majestad el Rey de los Deportes. Vaya si han sido peleadas las series de campeonato de ambas ligas, en especial la de la Liga Americana, donde tras cinco juegos, cuatro de ellos se han definido por diferencia de sólo una carrera en la pizarra.
Por cierto, será en la casa del campeón del joven circuito donde iniciará la Serie Mundial, así que Boston o Detroit tendrán la ventaja de disputar hasta cuatro juegos en casa, si es que la Serie se va al máximo del morboso y frenético juego siete. Designar a un favorito no resulta un ejercicio sencillo a estas alturas, pues el pitcheo ha lucido, en especial el abridor, aunque los bullpen de Boston y San Luis han demostrado sensacional efectividad, y quizá esa sea la ventaja de los dos equipos que visten el color rojo en sus uniformes.
El "mágico octubre" es la era de los milagros, y de los hombres que se ponen el traje de héroes para dar a su equipo el gallardete, siempre resulta fantástico el seguir pitcheo a pitcheo para averiguar cuál será el movimiento definitivo que incline la balanza a favor de alguno de los bandos. Y al ser el beisbol un deporte tan complejo y exacto, ese movimiento puede ser desde un toque de bola hasta un cuadrangular; un sencillo detalle puede hacer la gran diferencia.
Seguro estoy de que será una gran Serie Mundial, y de que sumará algunos otros aficionados al deporte rey, pues el Clásico de Otoño es también el tiempo idóneo en el que surgen espectadores que no siguieron ni un duelo de la temporada regular, pero se suman al frenesí de la WS, y algunos terminan entrando de por vida a la afición beisbolera. Por cierto, hace unos días el portal de espn.com publicó un recomendable reportaje de Arash Markazi, donde recuerda de manera sensacional el histórico jonrón de Kirk Gibson contra Dennis Eckersley en el juego uno de la Serie Mundial de 1988, para que los Dodgers vencieran a los Atléticos. El portal en español de esa misma cadena reprodujo un extracto en castellano, denle un repaso en cuanto tengan oportunidad.
En nuestro terruño es una lástima que el equipo de Lerdo haya quedado fuera de la temporada en la Liga Mayor de Beisbol de La Laguna. Quizá falta de recursos, quizá sólo faltó comunicación efectiva; lo cierto es que los aficionados son los afectados, al quedarse sin oportunidad de gozar del tradicional beisbol invernal en el Parque San Fernando. El equipo de San Pedro también estaba en 3 y 2, pero se han aferrado a la temporada, con ese temple que ha caracterizado a la escuadra sampetrina a lo largo de la historia.
Se aceptó a un pelotero profesional extra, por lo que ahora cada equipo cuenta con cinco, entre profesionales y foráneos. El movimiento se realizó con intención de mejorar aún más el nivel de juego de la liga, pero podría resultar contraproducente, al alejar a los equipos en nivel competitivo. Veremos qué sucede, finalmente, en el beisbol sólo hay algo predecible: que nada es predecible. Este fin de semana se repite la serie final del año anterior, entre Tlahualilo y San Pedro, debe resultar en dos grandes contiendas.
Ya entrados en el final del año, empezarán a surgir noticias de Vaqueros Laguna para su aventura de 2014. Por lo pronto, nos enteramos de que habrá un primer refuerzo, pero será para la oficina, aunque no viene a sustituir a nadie, sino a sumar fuerzas. Y habría otra contratación de un catcher mexicano que ha jugado toda su carrera en la Zona Sur. Estos son movimientos ya prácticamente seguros, pero sólo se podrán dar como ciertos una vez que se tenga la confirmación oficial. Buen fin de semana, y recuerden disfrutar la vida, hasta que caiga el out 27.
Aarón Arguijo G.
Aaronaldo9@hotmail.com
