El derrumbe del techo de un templo católico que se encontraba en construcción causó esta mañana la muerte de un niño de 10 años y lesiones a 34 personas en el municipio de Juárez, del estado de Nuevo León, informaron las autoridades.
Fuentes del servicio de Protección Civil en el municipio indicaron a Efe que a las 09:50 hora local (14:50 GMT) se recibió el reporte del desplome del techo sobre los feligreses que en ese momento escuchaban misa, debido a la acumulación de agua por las recientes lluvias en esta zona del país.
Al lugar se trasladaron elementos de diversas corporaciones de auxilio, que atendieron a 34 personas por lesiones. Nueve de ellas requirieron ser trasladadas a diversos hospitales, ya que presentaban heridas de consideración.
El cuerpo del menor fallecido, que se encontraba en compañía de su familia, será llevado al Servicio Médico Forense después de que el Ministerio Público dé fe de los hechos, para que se le realicen las pruebas que marca la ley.
La zona fue acordonada por personal de Protección Civil de Juárez y del estado, que realizan pesquisas en el lugar.
Esta es la segunda ocasión en los últimos años en que las lluvias provocan derrumbes en iglesias de Nuevo León. La anterior sucedió en 2008 cuando se vino abajo el campanario de la Catedral de Linares, sin causar víctimas.