La OMS y China han descartado que el virus se pueda propagar de humano a humano, pero sí admiten que esta nueva cepa es mucho más dañina que el anterior H5N1. ARCHIVO
El virus H7N9 de la gripe aviar ha infectado a por lo menos 63 personas y causó la muerte de otras 14, según estadísticas oficiales chinas publicadas hoy.
Shanghai es la región donde mayor concentración de casos se produjeron, con 24 de los 63 detectados, mientras que la provincia de Jiangsu registró 17 y Zhejiang 16, según la Comisión Nacional de de Planificación Familiar y Salud.
Por el momento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y China han descartado que el virus se pueda propagar de humano a humano, pero sí admiten que esta nueva cepa es mucho más dañina que el anterior H5N1.
La cuestión de las muertes vinculadas a enfermedades infecciosas o pandemias es un tema sensible en Asia, pero especialmente en China, después de que en 2003 la opacidad y la ocultación de la magnitud del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) provocara la muerte de al menos 350 personas.
Pekín ha prometido la máxima transparencia en la gestión del brote de gripe aviar, con el objetivo de tranquilizar a la comunidad internacional de que no se producirá la opacidad practicada durante la crisis del SARS en 2003.
