Un incendio forestal en el sur de California que consumió siete viviendas y cabañas en las montañas sobre Palm Springs se extendió y ahora los bomberos siguen de cerca las condiciones meteorológicas.
La vocera del Servicio Forestal de Estados Unidos, Kate Kramer, dijo que el fuego creció durante la noche del jueves a unas 9,500 hectáreas y había sido contenido solamente en un 15% para el viernes por la mañana.
El incendio avanza en varias direcciones en las Montañas de San Jacinto y sigue amenazando la aldea de Idyllwild. Unas 6,000 personas permanecen evacuadas.
Kramer indicó que una tormenta eléctrica podría llegar el viernes a la zona con vientos racheados y erráticos y posiblemente rayos, con sólo un 20% de probabilidades de lluvia.
Cerca de 3,300 bomberos, ayudados por aeronaves, trabajan en la contención del incendio.
