Siguen los problemas en las Águilas. (NFL)
El receptor Riley Cooper está de nueva cuenta en el ‘ojo del huracán’, hace más de un mes fue castigado por proferir insultos racistas a miembros de seguridad durante un concierto, hoy en la práctica se agarró a golpes con un compañero.
Cary Williams y Cooper se engancharon tras una jugada en el entrenamiento de las Águilas, el esquinero impide que Riley capture el balón y ambos caen al suelo, después inicia la pelea.
Williams impacta algunos golpes en el casco de su compañero y lo toma de la barra, mientras el receptor intenta defenderse, de inmediato otros jugadores se aproximaron para separarlos.
Cary estaba muy molesto, fue Michael Vick quien tuvo que acercarse a calmarlo.
Esta pelea se da a tan sólo unos días de que las Águilas de Philadelphia debuten en la temporada 2013, enfrentando a los Pieles Rojas en Washington, en el primer “Monday Night.”