A la espera. Los operadores y concesionarios de Transportes del Nazas permanecieron afuera de la Casa de Gobierno.
Choferes y concesionarios de los autobuses "rojos", suspendieron el servicio desde la mañana de ayer y permanecieron a las afueras de la Casa de Gobierno de esta ciudad, a la espera de que una comisión y autoridades del transporte, que permanecieron reunidas en la ciudad de Durango el día de ayer, ofrecieran una solución definitiva al conflicto que están enfrentando.
La agrupación de Transportes del Nazas acudió a las afueras de la Casa de Gobierno a bordo de unas 30 unidades que utilizan en la prestación del servicio público suburbano en las tres ciudades, las cuales estacionaron sobre la avenida Juan Navarrete sin impedir el libre tránsito por esta arteria.
Los operadores y dueños de las unidades de Transportes del Nazas, exigieron mayor seguridad para ellos y la comunidad usuaria, luego de que los autobuses que les han incendiado en distintos puntos de la región.
Como resultado de estos hechos, dos choferes continúan hospitalizados por quemaduras y otro ya perdió la vida.
La manifestación se realizó de manera pacífica y no obstruyeron la circulación a las afueras de la sede de Gobierno, como tampoco impidieron el funcionamiento de las dependencias estatales que se encuentran alojadas en las instalaciones de la Casa de Gobierno.
Señalaron que sólo decidieron concentrarse en este lugar para conocer los resultados de la reunión que sus representantes llevaban a cabo con las autoridades estatales, en la capital de Durango.
Los operadores manifestaron que la autoridad estatal debe ofrecer una solución definitiva a este conflicto, en el que tanto ellos como la comunidad usuaria se ha visto seriamente afectados.
Según señalaron, las compañías aseguradoras se han negado a cubrir los daños que presentaron las ya cinco unidades incendiadas, debido a que este tipo de hechos no los incluye la póliza.
REVISIONES CONTINUARÁN La Subsecretaría de Gobierno en La Laguna de Durango dio a conocer que las revisiones al transporte público continuarán por parte de la Policía Militar y elementos de la Policía Estatal.
El objetivo es verificar que las unidades cuenten con una concesión o permiso y que se cumpla con el reglamento en materia de transporte. Sin embargo, la dependencia pidió a los usuarios y concesionarios ser pacientes en caso de que este tipo de acciones les lleguen a generar molestias, pues se someterá a revisión a más de 600 unidades que prestan el servicio y lo cual se estima realizar en un lapso de 40 días.