Vicente Guerrero
Las lluvias del pasado mes de septiembre pusieron en alerta a las autoridades de Salud de Vicente Guerrero porque el río Súchil al desbordarse llegó hasta las tuberías de aguas negras que estaban quebradas arrastrando la suciedad, lo que provocó un brote de hepatitis en el poblado Francisco Javier; 22 niños de primaria estuvieron infectados.
Salvador Vázquez Hinojosa, presidente municipal de Vicente Guerrero, dijo que fue una emergencia que acaparó la atención del municipio y del Sector Salud, pero que no hubo necesidad de llegar a medidas extremas como el cierre parcial de la escuela.
Sin embargo, la primaria del poblado suspendió sus actividades por espacio de dos días en cuanto se supo del brote de hepatitis para evitar un mayor contagio.
Al lugar llegó una brigada médica encabezada por el galeno Eduardo Guzmán, quien atendió a los 22 niños que se detectaron infectados; la atención se les brindó en sus mismos domicilios todos los días durante todo el tiempo que duraron enfermos. Al evitar que salieran a la calle también se evitó un mayor contagio.
Los niños se enfermaron porque acudieron a jugar y bañarse en el río contaminado y eso provocó la infección y el brote que se transmitió en la escuela.
Mientras los niños eran atendidos en sus casas por personal médico, los ejidatarios vigilaban que nadie se metiera a nadar al río para evitar que siguieran aumentando los enfermos.
Se hicieron los trabajos pertinentes para solucionar el desperfecto en la red de drenaje y aguas negras y evitar que otro desbordamiento del río volviera a contaminarlo.
Pero el problema, aseguró el alcalde, ya pasó y todo está en plena calma.