Hoy martes 31 de diciembre de 2013 es el último día de Eduardo Olmos Castro como presidente municipal de Torreón. A partir del primer minuto del miércoles 1 de enero de 2014, Miguel Ángel Riquelme Solís será alcalde de este municipio.
A las 12 del día de hoy será instalado el Ayuntamiento de Torreón 2014-2017 en el séptimo piso de la nueva sede de la Presidencia Municipal, ubicada en la Plaza Mayor del Centro de la ciudad.
En la sesión de instalación, que será conducida por Miguel Mery Ayup, designado secretario de la comisión instaladora, rendirá protesta legal el presidente municipal Miguel Riquelme. Posteriormente, éste les tomará la protesta a los síndicos y regidores que integrarán el cuerpo colegiado.
Serán 20 los integrantes del nuevo Cabildo de Torreón y estarán divididos en cuatro fracciones: Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN), Movimiento Ciudadano (MC) y Partido de la Revolución Democrática (PRD).
De acuerdo con el protocolo que marca el nuevo Reglamento Interior del Ayuntamiento de Torreón y el Código Municipal del Estado de Coahuila, se convocará a la primera sesión ordinaria que se celebrará a las 9:00 horas de mañana miércoles primero de enero.
En ésta, Riquelme Solís tomará la protesta a quienes ocuparán la Secretaría del Ayuntamiento, Jorge Luis Morán y la Tesorería Municipal, Enrique Mota, así como la Contraloría y la Dirección de Seguridad Pública.
Además, el Cabildo aprobará las comisiones y se realizará la entrega-recepción oficial de la situación que guarda la administración pública municipal.
Posteriormente, a las 12 del día en el Teatro Nazas se llevará a cabo la sesión solemne de Cabildo en la que Miguel Riquelme rendirá protesta como alcalde de cara a la ciudadanía, a la que dirigirá su primer mensaje de gobierno.
A esta sesión asistirá el gobernador de Coahuila, Rubén Moreira.
Eduardo Olmos deja la alcaldía de Torreón en medio de cuestionamientos de ediles de oposición, grupos empresariales y de la sociedad civil.
Los señalamientos se han centrado en el escaso apoyo al fomento económico, el deterioro de los servicios públicos, los incumplimientos de compromisos financieros, dudas respecto a la deuda pública y el aumento en algunos delitos del fuero común, como asaltos a transeúntes y negocios.
