Recrudece la violencia en las zonas serranas y en La Laguna de Durango en donde personal que labora para el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha sido blanco de la delincuencia.
En Santa Cruz Luján en los límites de los municipios de Tlahualilo y Gómez Palacio, se registró un secuestro de un médico, el que tuvo que saltar desde un vehículo en movimiento y atravesar unas milpas, mientras a sus espaldas se escuchan algunas detonaciones.
Este tipo de situaciones fueron informadas al anterior delegado del IMSS, Rogelio Alonso y se firmaron algunos convenios que no fueron cumplidos, como el hecho de colocar cristales blindados en las áreas de Urgencias para evitar que algunos pacientes fueran "rematados" cuando son atendidos y el colocar botones de pánico conectados a los corporaciones de seguridad .
Por lo que ahora lo único que queda es el realizar algunos cursos sobre cómo reaccionar en caso de violencia.
Reiteró que la situación más grave en materia de inseguridad se localiza en la Sierra y en La Laguna.
Otro incidente se registró hace un par de semanas cuando una ambulancia de este instituto fue baleada por un grupo de civiles armados en la comunidad de Vencedores en el municipio de San Dimas.
Lo anterior fue informado por el secretario General de la Sección 16 del IMSS, Eduardo Matuk Sariñana, quien mencionó que trabajadores de esta organización han sido objeto de intento de secuestros, homicidios y asaltos.
En El Salto, cabecera municipal de Pueblo Nuevo en el mes de febrero hubo un día en que los trabajadores del Hospital del IMSS no pudieron salir, porque el inmueble fue rodeado por un grupo de desconocidos, se tuvieron que quedar a dormir en el lugar.
Posteriormente se hizo la aclaración de que la muerte de una persona que ocurrió en el mismo no fue una negligencia, pues los médicos no son dioses, situación que después se comprobó.