La maternidad en edades tempranas representa un grave riesgo para la salud de las adolescentes, da a conocer el IMSS de Coahuila.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la adolescencia ocurre entre los 10 y los 19 años de edad y se caracteriza por una serie de cambios orgánicos, así como por la integración de funciones de carácter reproductivo.
Es importante destacar que un embarazo a temprana edad repercute en la salud de la madre y del producto y afecta el proyecto de vida de los jóvenes, de ahí que en términos sociales y médicos se considera un problema grave.
Dentro de las posibles causas que influyen en los embarazos de adolescentes se consideran factores personales, familiares, sociales, una pobre o nula educación sexual y una baja autoestima.
La ayuda que requiere el grupo de adolescentes varía en función de sus características particulares, tales como: la escolaridad y el contexto social en el que viven.
Si bien se trata de un problema multifactorial, el Instituto Mexicano del Seguro Social continuará en el esfuerzo de prevención, no solamente por los problemas sociales que ello desencadena, sino además porque representa una gran riesgo para la salud, considerando la inmadurez en el organismo de las jovencitas y la posibilidad de contraer enfermedades de trasmisión sexual.
