Por años. Martín podría pasar el resto de su vida en prisión.
Los olores fétidos que salían de una vivienda ubicada sobre el bulevar Durango alertaron a los vecinos y decidieron llamar a la Policía, más tarde los agentes encontraron los cadáveres putrefactos de una joven de 19 años de edad y de su hija, de apenas ocho meses de nacida, quienes habían sido asesinadas por la pareja sentimental de la mujer, siendo detenido 16 días después; ayer, a un año del crimen, se informó que el homicida fue sentenciado a 80 años de prisión.
LA SENTENCIA MÁS ALTA
La Fiscalía General del Estado informó que gracias a las pruebas otorgadas por el Ministerio Público se logró una sentencia de 80 años de cárcel en contra de Martín Román Guzmán Ledezma, quien cuenta con 26 años de edad y con domicilio en la colonia Hidalgo, por el delito de homicidio calificado en agravio de su entonces pareja sentimental, María Fernanda Amador Quiñones, de 19 años y de su hija Laura Leticia Amador Quiñones, de ocho meses de nacida, el 29 de marzo de 2012.
El informe del juez detalló que por el asesinato de la menor fueron 45 años de cárcel, y por el crimen de su pareja 35 años. Siendo la sentencia más alta otorgada por el delito de homicidio calificado. Además se le impuso una multa de 349 mil 162.80 pesos y el pago de 93 mil 346.40 pesos por concepto de reparación del daño.
Fue el 29 de marzo del año pasado cuando Martín Román citó a María Fernanda en un domicilio ubicado en bulevar Durango, entre Aldama y privada de Ocampo, en el barrio de Tierra Blanca, ahí, después de una discusión el sujeto atacó a golpes a su pareja hasta verla morir, acto seguido, contra el suelo estrelló a la bebé, quien también quedó sin vida.
Pasaron 14 días y la Policía encontró los cuerpos putrefactos, tras la denuncia de los vecinos. Y dos días después se logró la captura del asesino.
A un año del crimen se logró la sentencia.