Podrían dársela a su expareja.
Charlie Sheen está furioso con el Departamento de Niños y Servicios Familiares de California, ya que todo apunta a que le regresarán los derechos de custodia de sus hijos a su ex Brooke Mueller, después de que ésta ha concluido su rehabilitación contra las drogas. Sheen llama al personal de los servicios familiares de "ineptos y retrasados".