Diabetes. Su familia la acompaña en el tratamiento para dializarse, su riñón dejó de funcionar a causa de la diabetes.
Conectada a una máquina que hace la función de sus riñones, doña Eva Armijo Herrera tiene un año que recibe diálisis, diariamente. Fue diagnosticada con diabetes a los 32 años y súbitamente le dejó de funcionar un riñón.
Uno de sus nietos, Julio César Márquez, tuvo que aprender a usar la máquina para dializar y a conectar a su abuela de un catéter que tiene permanentemente.
"Vine aquí a capacitarme. Te enseñan y te ponen un máquina de cómo tienes que ir haciéndole y al final te dan un certificado. La máquina lo que tiene difícil son las anotaciones que tienen que hacer, es como ir a la escuela", dice el joven.
Cuenta Julio que para usar la máquina de diálisis se requiere hacer multiplicaciones y varias operaciones que en un principio le resultaron complicadas.
"De primero sí batallaba y tenía miedo. Ahora ya sé bien qué hacer para no lastimarla, sé bien que no le duele. Me fijo bien del catéter y no tocar algunas partes porque si no se infecta y lavarme bien las manos al conectar y en el momento".
Mientras Julio conecta a su abuelita charlan de todo, hablan de la vida y su relación es muy cercana. Doña Eva asegura que lo regaña, pero lo dice entre risas.
"Mi nieto es serio, pero sí lo regaño mucho, que no se salga y que sea un muchacho normal. Nomás quiere andar en la calle. Pero siempre está conmigo, siempre que estoy en el Seguro aquí está él".
HERENCIA Doña Eva Armijo Herrera heredó la diabetes de su familia paterna; de seis hermanas cuatro padecen la enfermedad crónica. Incluso una de ellas también recibió diálisis y hace unos años falleció.
"A mí no me dolía nada nomás fui con el doctor y me dijo que traía ya muy mal el riñón, que necesitaba operación y yo no quise, todavía me fui un año y después volví a operarme".
Desde aquella operación doña Eva se dializa diariamente en casa, cada seis meses le cambian el catéter que tiene conectado a unos centímetros de su lado izquierdo.
En la cama número 192 del Hospital General de Zona No. 18 Doña Eva asegura que con un riñón nuevo podría dejar de dializarse.
"Está difícil para hallar quién. Yo nunca me he apuntado en la lista de espera para un riñón. Dicen que con un riñón ya no me tuvieranque dializar".
JULIO C. MáRQUEZ Nieto de paciente
El siglo de torreón / Violeta Rodríguez
