El plantón de los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en la plancha del Zócalo capitalino se extendió al circuito vial y hasta los portales de la sede del gobierno del Distrito Federal.
Las casas de campaña y plásticos que los manifestantes instalaron ocupa casi la totalidad de la plaza de la Constitución. Incluso, rodean las carpas que el gobierno capitalino montó para el Guardián Urbano y las salas de cine 3D que no han sido desmontadas.
Los maestros, con cobijas, se encuentran en las inmediaciones de los accesos de la estación del Metro Zócalo. La extensión del plantón llega a la calle Pino Suárez, entre el circuito vial del Zócalo y la calle Venustiano Carranza.
Esta situación dificulta el paso de los peatones y ha generado conflictos viales en las calles aledañas al primer cuadro de la ciudad de México.
También los plásticos están sobre la calle 20 de Noviembre. Sólo dejaron libre la entrada que utiliza el jefe de Gobierno del Distrito del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera.
De acuerdo con estimaciones del gobierno capitalino, hay aproximadamente 10 mil maestros que llegaron a la ciudad de México para protestar por las reformas secundarias a la Ley General de Educación que se prevé ocurra este miércoles en la Cámara de Diputados, la cual también está "blindada" con elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del DF.
Este martes, el gobierno capitalino emitió un comunicado donde manifestó su disposición a coadyuvar cualquier acción para el entendimiento entre el gobierno federal y la CNTE.
"Esto, para que el campamento de la CNTE instalado en el Zócalo de la ciudad de México, no siga afectando la vida diaria de millones de personas", se lee en el breve comunicado.
Tras reiterar que respeta el derecho a la libre expresión, el gobierno local reprueba los actos violentos que trastoquen la vida diaria de los capitalinos.
