Conflicto. Los afectados por la construcción de la supercarretera Durango-Mazatlán intentan que se les pague lo justo por la afectación de sus tierras.
Al considerar que en Durango el precio que se fijó a la superficie afectada por la construcción de la carretera Durango-Mazatlán fue inferior en comparativo con el estado de Sinaloa, ejidatarios continúan en diálogo con autoridades y con reuniones de trabajo en el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin).
Lo anterior fue informado por el delegado de la Procuraduría Agraria (PA), Pedro Silerio García, quien manifestó que en este momento el trabajo se centra en este instituto porque los ejidos cuestionan los valores que le dan a la tierra al considerar que son muy bajos.
Por lo anterior dijo esperar que Indaabin tome en cuenta elementos como el valor turístico, de captación de agua, ambiental y de captura de carbono, es decir, todo valor debe de plasmarse para que en un acuerdo entre la autoridad, los propios ejidos y las comunidades se quede un valor fijo pero acorde a las expectativas de los afectados.
Con esta posibilidad la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) pueda realizar la emisión de la indemnización correspondiente porque existe un mayor entendimiento.
Abundó "entable comunicación con mi homólogo de Sinaloa para que nos apoye con algunos elementos, a ellos se les dieron avalúos muy superiores con relación a los que se dan a Durango y en ese sentido nos sumarnos a las pretensiones de las comunidades afectadas con asesoría y representación legal o lo que corresponda cuando se dé el precio de la tierra".