Persisten. Los robos en jardines de niños y escuelas primarias siguen imparables en La Laguna. En Gómez Palacio y Lerdo se registraron 12 robos en el mes de agosto.
Durante el pasado mes de agosto se registraron 12 robos a planteles educativos en los municipios de Gómez Palacio y Lerdo, según las denuncias interpuestas ante la Agencia Investigadora del Ministerio Público.
Computadoras, cable de cobre, proyectores y diverso material de oficina, son algunos de los objetos que se llevan los ladrones en sus incursiones nocturnas a los jardines de niños y escuelas primarias o secundarias, aunado a los daños que ocasionan en las instalaciones eléctricas o de agua potable, así como a puertas y ventanas. La gran mayoría de este tipo de delitos quedan impunes, de acuerdo a lo manifestado por los profesores.
Uno de los planteles educativos más afectados es el Jardín de Niños Rubén Darío, de la colonia Chapala, en Gómez Palacio, donde desde el ciclo escolar pasado y el actual han ocurrido siete robos.
Durante el ciclo escolar pasado sufrieron el robo de cable y de tubería de cobre, de aparatos electrónicos, material diverso, hasta partes de los juegos infantiles, así como daños en 25 vidrios de varios salones.
Este tipo de delitos afectan sobremanera a los niños, pues se quedan sin el equipo de cómputo, por ejemplo, para adquirir conocimientos de cómo manejar este tipo de herramientas. Los padres de familia se ven también afectados, ya que ellos son los que deben recuperar lo perdido o dar para la reparación de los daños.
Otro de los planteles educativos afectados es la Primaria Mariana León de Chávez, que en tres meses fue visitada tres veces por los amantes de lo ajeno y desde 2008 a la fecha suman ocho robos, a pesar de estar ubicada en el sector Centro de Gómez Palacio.
Por lo general, los ladrones cometen sus hurtos durante altas horas de la noche, aprovechando la oscuridad, la falta de alumbrado público y de vigilancia policiaca.
Al reiniciar el ciclo escolar, el pasado agosto, fueron varios los centros educativos que habían sido "visitados" por los amantes de lo ajeno, situación que resulta por demás perjudicial, ya que deben arreglar de inmediato los vidrios de puertas y ventanas, para evitar más robos, aunado a las molestias de acudir a interponer las denuncias y luego ratificarlas, lo que en más de las ocasiones resulta infructuoso debido a que los delitos no se esclarecen y quedan impunes.
