Filme. Demián Bichir dio su voz a uno de los personajes de la cinta El Santos Vs la Tetona Mendoza; actualmente en cartelera.
Del 2012 que se va, año en el que su nombre le dio la vuelta al planeta, Demián Bichir tiene muy clara la experiencia que con más cariño atesorará.
No se trata, aclara rápido en entrevista telefónica, de haber sido nominado al Oscar a Mejor Actor por al filme Una Vida Mejor, y haber competido de igual a igual con astros de la pantalla como Brad Pitt, George Clooney, Gary Oldman y Jean Dujardin.
"Haber trabajado con mi hermano Bruno (Bichir) por primera vez como director (en la obra Nadando con Tiburones) fue una experiencia que queríamos desde hace mucho tiempo llevar a cabo y resultó mucho mejor que lo que todos pensamos. Eso, junto con la temporada, que fue muy exitosa.
"Todo mundo espera que diga que la nominación (al Óscar), pero ese tipo de circunstancias son completamente azarosas de alguna manera, hay muchos, miles de trabajos al año que tienen la misma posibilidad. Pero los proyectos que tú mismo generas son realmente los únicos de los que eres responsable", dice Bichir.
Este año, el coahuilense de 49 años tuvo que repartir su tiempo entre una exitosa temporada de 126 funciones del montaje en el Teatro Insurgentes, al lado de Ana de la Reguera y Alfonso Herrera, y viajes constantes a Los Ángeles para asistir a las ceremonias de premios como los Óscar, Spirit Awards y del Sindicato de Actores.
Descarta, de manera tajante, considerar al 2012 como el mejor año de su carrera, pues no quiere menospreciar experiencias anteriores.
"Han habido muchos años en los que han sucedido cosas interesantes", explica. "Lo que pasa es que, lógicamente, no es lo mismo ganar un torneo local que una copa del mundo".
Su vida privada, asegura el actor de Salvajes, no ha cambiado ni cambiará en 2013 en lo absoluto por los reflectores que tuvo y que ahora siguen su trayectoria.
"Mi vida sigue siendo igual, lo que pasó es que más gente en Estados Unidos sabe mi nombre y de alguna manera hay más proyectos que llegan directos. ¿Que si tengo más fans? Eso sí no sé, ni Twitter tengo, o sea que no sé", expresa con humor.
Sobre las posibilidades laborales que le deparará 2013 opta por ser cauto y no dar detalles hasta que todo esté confirmado, pero acepta que sus compromisos se han incrementado.
"Hay un montón de películas a las que terminas diciéndoles que no, hay otras que quieres y que no te quieren, hay otras que peleas y las ganas. Es la misma lucha. Yo estoy acostumbrado a soltar los anzuelos por todos lados para ver qué se pesca".
Bichir, quien en estas fechas graba en Estados Unidos el piloto de la serie The Bridge, que coprotagoniza al lado de la alemana Diane Kruger, dice que no es un hombre al que le guste ponerse metas cada año que empieza.
"(Los retos) me los pongo todos los días, no me espero a que pasen 12 meses, me los pongo todos los días. Muchas veces el reto más importante es salir vivo del Periférico", bromea.
Aunque, eso sí, no duda en reconocer que tiene sueños a futuro, y que estos tienen que ver con teatro, el arte con el que creció gracias a las carreras de sus padres, los actores Alejandro Bichir y Maricruz Nájera.
"El día que yo pueda llenar un teatro en Nueva York, en Londres y en Francia", menciona, "entonces sí va a ser increíble".